El nuevo presidente de Brasil, el neofascista Jair Bolsonaro, puso este miércoles manos a la obra, en su primer día de funciones, para realinear a su gobierno con el de Estados Unidos, presidido por Donald Trump, e implementar su programa conservador con el anuncio de polémicos decretos que desfavorecen a los grupos indígenas, descendientes de esclavos y la comunidad LGBT.
Ha habido una larga tradición en Brasil de elegir presidentes que por alguna razón eran enemigos (de Estados Unidos). Ahora es todo lo contrario, somos amigos
, dijo Bolsonaro a periodistas tras reunirse en privado en el Palacio de Planalto con el secretario de Estado estadunidese, Mike Pompeo, quien asistió el martes pasado a la toma de posesión del gobernante.
Momentos antes, el canciller brasileño, Ernesto Araújo, explicó que las dos mayores economías del hemisferio trabajan por un orden internacional diferente
. Tras reunirse con Pompeo en el Palacio de Itamaraty, comentó a la prensa que su gobierno retomará sus políticas menos globalistas y apoyará a quienes luchan contra la tiranía
 en Venezuela.
Araújo afirmó que Brasil se está realineando consigo mismo, con sus propios ideales
, en una clara crítica contra los gobiernos de los ex presidentes izquierdistas Luiz Inácio Lula da Silva (2003-2010) y Dilma Rousseff (2011-2016).
Pompeo detalló a reporteros que en su reunión con el canciller brasileño habló sobre los gobiernos de Venezuela, Cuba y Nicaragua. Y añadió:Â Tenemos una oportunidad de trabajar juntos contra esos regímenes autoritarios
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El Departamento de Estado especificó que ambos líderes discutieron un mayor fortalecimiento de los lazos económicos y comerciales para incrementar la prosperidad de los ciudadanos de ambos países y toda la región, incluida la promoción de la transparencia y la buena gobernanza para la inversión en la región
.
Asimismo, Bolsonaro confirmó a Pompeo que su país abandonará el pacto migratorio consensuado en la Organización de las Naciones Unidas, de acuerdo con fuentes de la presidencia. Dicho acuerdo fue ratificado el mes pasado en la Asamblea General del organismo incluso por el gobierno de Michel Temer, el ahora ex presidente brasileño, pero Estados Unidos rechazó adherirse al pacto con el argumento de que impone normas que podrían afectar su soberanía, que son las mismas razones que esgrime ahora Bolsonaro para excluir a Brasil.
En su primer día en funciones, el neofascista Bolsonaro aprobó un decreto que hace responsable al Ministerio de Agricultura de la toma de decisiones sobre tierras indígenas y quilombolas (poblados de descendientes de esclavos fugitivos), medida criticada por organizaciones indigenistas y ambientalistas.
Otra orden excluyó las peticiones de la comunidad LGBT al recién creado Ministerio de la Mujer, de la Familia y de los Derechos Humanos. También dispuso que las organizaciones internacionales y las no gubernamentales sean supervisadas por la Secretaría del Gobierno.
En actos separados, Bolsonaro asistió a la toma de posesión de sus ministros de Defensa, Fernando Azevedo e Silva; Casa Civil, Onyx Lorenzoni; Secretaría General de la Presidencia, Gustavo Bebianno; Secretaría de Gobierno, Carlos Alberto dos Santos Cruz, y de Seguridad Institucional, Augusto Heleno.
En tanto, el nuevo ministro de Hacienda de Brasil, Paulo Guedes, redactó un decreto ejecutivo para una reforma al sistema de pensiones que podría generar ahorros por 12 mil 900 millones de dólares en la próxima década, reportó el periódico brasileño Folha de S. Paulo.
En tanto, el ministro de Justicia de Brasil, Sérgio Moro, prometió ampliar su cruzada anticorrupción, iniciada como juez de la operación Lavado Rápido, que llevó a la cárcel a decenas de políticos y empresarios de primer plano, entre ellos el ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva.
Gira de Pompeo por AL
Por la tarde, Pompeo viajó de Brasilia a Cartagena para reunirse durante una hora con el presidente de Colombia, Iván Duque, en la Casa de Huéspedes Ilustres. Ambos abordaron en privado temas como los esfuerzos antinarcóticos, los avances del proceso de paz con las guerrillas locales, sus relaciones comerciales, pero sobre todo su posicionamiento ante el gobierno venezolano.
Nuestras conversaciones se centraron en una cantidad de temas, de cómo podemos trabajar de manera conjunta a escala regional para quienes se escapan de Venezuela y lograr que ese país vuelva a sus bases democráticas
, dijo Pompeo en una declaración conjunta con Duque transmitida por el gobierno colombiano.
En tanto, la cancillería venezolana acusó a Pompeo de emitir órdenes directas a los gobiernos subordinados a Washington, con el objetivo de que escalen sus agresiones contra el pueblo de Venezuela, con el propósito de procurar un cambio de régimen por la fuerza
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