Más de 110 mil usuarios se quedaron sin suministro eléctrico este martes en la ciudad de Buenos Aires y los alrededores en medio de una ola de calor que alcanzó los 45 grados Celsius de sensación térmica, situación que llevó a las autoridades a decretar una Alerta Naranja por riesgo para la salud.
La Alerta Naranja implica que la situación climática puede ser muy peligrosa sobre todo para los grupos de riesgo, niños y mayores de 65 años.
Este apagón se da en el contexto de los tarifazos eléctricos que el gobierno del presidente Mauricio Macri ha llevado a cabo desde que asumió el mandato en diciembre de 2015, con el argumento de que para mejorar el servicio se debe pagar más caro.
Pasadas las 00:30 horas de este miércoles (hora local) eran más de 96 mil los usuarios afectados, con interrupciones del servicio que en muchos casos comenzaron el pasado lunes.
Según datos brindados por el Ente Nacional Regulador de la Energía (ENRE), en la zona correspondiente a la empresa Edesur, al sur de la Capital, fueron afectados 63 mil 438 usuarios, mientras que en el área a cargo de Edenor los usuarios sin energía en sus hogares fueron 48 mil 217, para un total de 111.655.
La situación ocurrió en un nuevo día de calor agobiante en Buenos Aires y alrededores: la sensación térmica, que registra la temperatura con la humedad y el viento, llegó este martes a los 45 grados en los barrios porteños, con un pico de 46.4 en la zona del Aeroparque Metropolitano (norte).
«Hoy tenemos récord de consumo y después de dos días de alta exigencia de la red, el nivel de cortes es menor a otros años gracias a las inversiones que se hicieron. No obstante todavía falta mucho por hacer para tener una mejor calidad de servicio», dijo a la prensa local Alejandra Martínez, portavoz de Edesur.
El Sistema de Atención Médica de Emergencia (SAME), organismo estatal, atendió este martes a 53 personas en las calles que se mostraron afectadas por el calor.
«Hoy tuvimos que atender a 31 mujeres y 22 hombres, entre los cuales 26 fueron derivados a distintos hospitales de la ciudad», informó Alberto Crescenti, titular del SAME.
El funcionario añadió que «la mayoría sufrió descompensaciones, deshidratación y problemas de presión».