TAILANDIA.
A pesar de estar en el 2019 aún hay padres que venden a sus hijas como si fueran una simple mercancía.
Tal es el caso de un millonario de nombre Arnon Rodthong, quien ofrece la cantidad de 315 mil dólares a quien se quiera casar con su hija Karnista, de 26 años, quien aún es virgen.
A pesar de que ella trabaja en el negocio familiar ubicado en la provincia Chumpho, al sur de Tailandia, al señor le molesta que siga soltera.
¿Será Lupita Nyong’o la nueva chica Bond?
La costumbre dicta que el hombre paga una dote cuando su hija contrae matrimonio, pero el hombre de 58 años ha aumentado la cifra, ya que además del dinero tendrá una participación en su granja valuada en varios millones de dólares.
Aunque no hay restricciones de nacionalidad, para casarse con la joven que también habla inglés y chino de manera fluida se debe cumplir con los siguientes requisitos:
No tiene que ser listo, con que sepa leer y escribir está bien. Pide no llevar sus títulos universitarios para presumir.
Que sea muy trabajador y nada flojo.
Debe ser un hombre tacaño y amar el durian (un alimento considerado como uno de los más apestosos del mundo).
El gusto por el durian se debe a que la granja de Rodthong procesa alrededor de 50 toneladas diarias de este alimento.
Quiero a alguien que se encargue de mi negocio y lo haga crecer. No quiero alguien con los grandes títulos académicos. Quiero a un hombre servicial con un gran espíritu trabajador. Eso es todo. En cuanto esté, a mi yerno le daré mis bienesâ€, finalizó.
Por su parte, Karnista se dijo agobiada por la publicación de su padre, la cual descubrió porque una amiga suya se lo enseñó. Y confirmó que de hecho sí sigue soltera.
Si tengo que casarme con alguien solo quiero que sea amable y una persona que ame a su familia», puntualizó.
Con Información del Excelsior