Nueva York. Donald Trump sufrió una de las peores derrotas legislativas en su presidencia este jueves, cuando el Senado, controlado por su partido, se sumó a la Cámara de Representantes para revertir su declaración de emergencia nacional
 con la finalidad de desviar fondos federales –no autorizados por el Congreso– para financiar su muro fronterizo, ante lo cual el presidente prometió usar su poder de veto, por primera vez desde que llegó a la Casa Blanca.
Con 59 votos contra 41, incluidos 12 senadores de la mayoría republicana que se sumaron a toda la bancada demócrata, se aprobó una medida –anteriormente aprobada por la cámara baja– para anular la declaración de la emergencia proclamada por el presidente después de que el Congreso había negado autorizar los fondos que solicitó para gastos de construcción de una parte del muro fronterizo.
Trump fue derrotado porque no quiso ceder aun cuando varios legisladores republicanos le habían solicitado retirar su declaración de emergencia, ya que los estaba colocando en una situación en la cual tenían que optar entre apoyarlo o defender la división de poderes, que incluye la exclusiva capacidad legislativa de controlar el gasto federal. Por cierto, muchos de ellos habían denunciado al presidente Barack Obama justo por este tipo de acciones, lo cual calificaban de abuso del Poder Ejecutivo.
Le advirtieron que esto estaba dividiendo a sus aliados en el Senado, pero su respuesta fue la de siempre: amenazar a sus propios correligionarios por atreverse a decirle que estaba equivocado. Poco antes de la sesión de este jueves, Trump tuiteó que un voto para la resolución de este jueves por senadores republicanos ¡es un voto para Nancy Pelosi (la líder de la mayoría demócrata en la cámara baja), el Crimen, y los Demócratas a favor de Fronteras Abiertas!
Momentos después de que el Senado aprobó la resolución contra la declaración de emergencia, Trump tuiteó una sola palabra:Â VETO
. Poco después envió otro mensaje para agradecer a los senadores republicanos fuertes
 que habían votado para apoyar la Seguridad Fronteriza y nuestro muro desesperadamente necesario
.
De hecho, los senadores republicanos insistieron en que sus votos no fueron contra el muro de Trump –casi todos señalando que están de acuerdo con el presidente en cuanto a que hay una crisis en la frontera–, sino en defensa de la división de poderes y que esta maniobra de usar una declaración ejecutiva para emplear fondos no autorizados por el Congreso representaba una violación constitucional.
Sin embargo, es la primera vez que el Congreso vota para bloquear una declaración de emergencia del Ejecutivo y es de las primeras ocasiones en que un grupo influyente de legisladores republicanos se atreven a desafiar abiertamente al presidente. Uno de ellos, Rob Portman, de Ohio, dijo que aunque estaba de acuerdo con la necesidad de fortalecer la seguridad en la frontera, no se puede hacer en violación de las normas constitucionales, afirmando que no implica que el presidente puede ignorar al Congreso y sustituir su voluntad por la voluntad del pueblo
.
Por cierto, fue la segunda vez en los últimos dos días en que se manifestó una grieta entre los deseos de la Casa Blanca y los legisladores republicanos, ya que el miércoles el Senado votó para poner fin al apoyo estadunidense a la guerra en Yemen encabezada por el régimen de Arabia Saudita, también ante la amenaza de Trump de emplear su poder de veto. La medida fue impulsada por el senador socialista democrático Bernie Sanders y el republicano Mike Lee, y se espera que será aprobaba fácilmente por la cámara baja próximamente.
Esta derrota, en los hechos, probablemente no impedirá que Trump proceda a desviar los fondos que desea para el muro fronterizo si hace lo que prometió y emplea el veto, ya que eso sólo podría ser superado por dos tercios del Congreso y no existe ese margen. Sin embargo, la declaración de emergencia podría ser desechada en los tribunales, donde varios gobiernos estatales, ambientalistas y diversos sectores han interpuesto demandas para frenar esta maniobra ejecutiva.
Mientras tanto, Trump ha solicitado 8.6 mil millones de dólares para su muro –mucho más que su solicitud anterior– en su presupuesto federal para el próximo año fiscal, aunque en la nueva dinámica de fuerzas en Washington, con los demócratas en control de la cámara baja, la propuesta presentada por Trump no será aprobada como está.