Golpe a Golpe
Por Juan Sánchez-Mendoza
+ Tamaulipas se vería afectado en infraestructura, según proyecto del PEF
+ Obras específicas del Presidente, con menos recursos por el subejercicio
+ Este día del grito independentista, López Obrador magnificaría su gestión
Tamaulipas es uno de los estados que más recursos económicos le aportan a las finanzas federales vía recaudación de impuestos: alrededor de 250 mil millones de pesos anuales. Pero en el proyecto del Presupuesto de Egresos 2020, aparece como una de las entidades más castigadas.
El documento remitido al Palacio Legislativo de San Lázaro, estima una reducción del 9.6 por ciento (en relación a lo asignado para el ejercicio fiscal  2019), aunque en términos reales podría ser mayor al considerarse el índice inflacionario.
Por ello los diez diputados federales representantes del terruño, sin que importe su filiación política, obligados están a trabajar unidos para cabildear, gestionar y defender la justa reciprocidad en el reparto del gasto público que por ley debe resolverse a más tardar el 15 de noviembre próximo.
Máxime cuando en infraestructura carretera, educativa, de salud y otras áreas se advierten drásticos recortes; tanto o más que en los apoyos para la producción agrícola y ganadera, desarrollo turístico e impulso deportivo, por citar algunos.
El gobernador Francisco Javier García Cabeza de Vaca, de cara al Jefe del Ejecutivo Federal, Andrés Manuel López Obrador –precisamente en Tula durante su gira de trabajo–, pidió correspondencia conforme a las reglas del Pacto Fiscal para que Tamaulipas reciba beneficios equitativos en relación a la recaudación de impuestos –Valor Agregado (IVA), Sobre la Renta (ISR), y Especial sobre la Producción de Servicios (IEPS), además de otros–. No por interés de ejercerlos el gobierno estatal pero sí para mejorar las condiciones de vida de quienes poblamos el estado.
De ahí, entonces, es cuando deben ponerse a trabajar Nohemí Alemán Hernández, José Salvador Rosas Quintanilla y Vicente Javier Verástegui Ostos (PAN); Mariana Rodríguez Mier y Terán (PRI); Olga Juliana Elizondo Guerra y Armando Javier Zertuche Zuani (PT); Mario Alberto Ramos Tamez (MC); Adriana Lozano Rodríguez, Olga Patricia Sosa Ruiz y Héctor Joel Villegas González (PES).
De lo contrario su paso por el Congreso de la Unión sería infructuoso.
Ajuste presupuestario
Aparte del recorte presupuestal a las entidades federativas –no a todas, eso debe quedar en claro–, el Presidente le ordenó a su secretario de Hacienda, Arturo Herrera Gutiérrez, disminuir las partidas a varias dependencias. Pero, en algunos casos, con sobrada razón. Y en otros, quizá injustamente.
A Gobernación, por ejemplo, se le retira el 90.45 por ciento de recursos, por la creación de la Secretaría de Seguridad Pública –cuya responsabilidad es pacificar al país a través de la Guardia Nacional–, siendo la más afectada en sus finanzas.
Le sigue la Secretaría de Turismo con un recorte del 42.69 %, merced a su ineficiencia; luego aparece la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (41.67);Â Â la Oficina de la Presidencia de la República con un ajuste del 41.48 por ciento; Trabajo y Previsión Social (33.54); Economía (30.92); y Agricultura y Desarrollo Rural (29.31).
Las secretarías más beneficiadas en su proyecto son la de Energía que tendría un incremento presupuestal del 78.14 por ciento; y la de la Función Pública (62.05), lo que lleva a suponer que el mentado ‘Peje’ le apuesta más al rescate del sector energético y a la transparencia del gasto.
En materia de salud y educativa apenas propone un incremento de 3.47 y 5.42 por ciento, respectivamente, aun cuando asegura públicamente que ambos sectores son los más importantes de su gobierno, así como la asistencia social que a través de la Secretaría del ramo apena tendría un incremento del 14.93 por ciento.
Esos recortes igual afectarían a los becarios de los programas ‘Jóvenes construyendo el futuro’, hasta en un 36 por ciento, pues a un año de (éste) ejercerse suman hoy cerca de dos millones los postulados a la becas, pero, por subejercicio, sólo aplicarán 587 mil 596 estudiantes.
Como justificación al ajuste presupuestal, el proyecto de presupuesto consigna recortes a cuatro de los proyectos prioritarios de López Obrador:
1) La construcción del Tren Maya, que en 2019 tuvo un presupuesto de 6 mil millones de pesos, el año venidero contará sólo con 2 mil 500.
2) El proyecto del aeropuerto de Santa Lucía –que está paralizado–, en 2019 recibió 15 mil millones de pesos (+/-), pero en 2020 sólo 5 mil 372 mdp para mantenerse.
3) Para la construcción de la refinería de Dos Bocas (Tabasco) se ejercen este año 50 mil millones de pesos, pero como no se han gastado, en 2020 la inversión bajará en casi un 20 por ciento (41 mil 256 millones de pesos es lo estimado).
4) El corredor del Istmo de Tehuantepec, también es un proyecto ocioso que hizo recular al Presidente, hasta el grado de ordenar menos recursos en su construcción.
Y es así como López Obrador marca su proyecto de Gobierno.
Lo malo, es que quiera afectar a Tamaulipas.
In(ter)depencia
Según ha filtrado el grupo compacto de Andrés Manuel López Obrador, este día innovará en el tradicional ‘Grito’, dando ¡20! ‘por las circunstancias y los impredecibles’
Esto da pie a que también los mandatarios estatales y/o municipales se avienten rollos ajenos a la conmemoración de la gesta heroica, que, por supuesto, confundiría más a nuestros niños y jóvenes sobre las razones que llevaron al movimiento independentista.
En fin, no está de más recodar que han transcurrido ya más de dos siglos de haberse proclamado la lucha independentista –que permitió al pueblo mexicano sacudirse el yugo opresivo de los españoles y construir una República–, pero todavía no se alcanzan los objetivos superiores que permitan a México destacar en el concierto internacional y continental como un país libre y soberano.
La tarea de ningún modo es sencilla, dada la hegemonía que establecen las naciones cuyas economías imponen y marcan el crecimiento y desarrollo de manera planetaria, subordinando a los países menos desarrollados y pobres.
En el contexto de la globalización y dada la cercanía de México con los Estados Unidos de Norteamérica, el concepto de independencia pasa a ser un asunto que nos remite a la historia y los héroes –sólo eso, en estricto apego a la verdad–, aunque persiste la legítima aspiración de todos los mexicanos de sobresalir y dejar de ser un país del tercer mundo.
En el plano internacional, el término de moda es interdependencia.
Y esa misma expresión alude las múltiples y variadas relaciones establecidas de manera necesaria con los vecinos cercanos y lejanos, en aras de una conveniencia mutua, aunque a México siempre le toque la peor parte.
También existe una serie de mecanismos e instituciones que se han consolidado en la nueva era de la globalización y están al servicio de las naciones ricas.
Por ejemplo el Banco Mundial (BM) y Fondo Monetario Internacional (FMI).
Estos organismos siempre marcan la pauta a seguir. Y son el brazo diplomático de la fuerza imperial.
E-m@il
jusam_gg@hotmail.com
Caminante no hay camino
México, no obstante haber diversificado sus relaciones con las naciones del orbe a lo largo de su historia, sigue moviéndose en la órbita estadounidense.
Su condición de país subordinado propicia que los ‘americanos’ insistan en apropiarse de nuestros recursos naturales, merced a su voracidad, a la vez que incrementan su influencia sobre diversas áreas de la economía nacional.
No se puede negar que el mexicano es un pueblo dependiente de los vecinos del norte en tecnología, inversión y comercio.
De igual manera estamos subordinados en lo que respecta a las importaciones de nuestros productos primarios, pues allende el río Bravo determinan cuándo y cómo vendernos insumos.
Esto demuestra que la balanza comercial es a favor, en mucho, de los gringos, aun cuando el Gobierno Federal festeje la renegociación del tratado bilateral, que sobre las rodillas hicieron sus funcionarios.
Lo peor del caso es que la usura internacional y algunos políticos de la Unión Americana ya exhibieron la tentación de querer intervenir en asuntos de política interna y exterior –además de participar en el reparto del petróleo y/o sus dividendos–, con el pretexto de la defensa de sus intereses, arrogándose así la facultad de ser árbitros de la democracia y la libertad en cualquier parte del mundo.
Es algo que no toleramos los mexicanos, pese a las innegables diferencias que existen entre las fuerzas políticas que se mueven al interior del país y en más de una ocasión han amenazado la estabilidad social y política, pese al profundo daño que hacen a México con sus constantes escaramuzas.
Conjuntamente y en lo particular, coincidimos en defender lo que generaciones anteriores nos legaron para darle sentido al vocablo Independencia.
Es decir, con todo y los tropiezos que tenemos y las evidentes carencias que impiden un justo desarrollo a nivel nacional, al momento en que se percibe en riesgo la soberanía, la paz y la libertad, las diferencias internas se atenúan y se antepone el interés superior de México.
Tampoco se puede soslayar el hecho de que en casa tenemos fuerzas retrógradas que trabajan denodadamente para entregar la plaza a intereses externos.
Afortunadamente son una minoría de apátridas que no han podido contaminar a la gran mayoría de los mexicanos.
Se hace camino al andar
En este mes patrio –como se le llama a septiembre–, se conmemoran (el día 13) la defensa que los Niños Héroes hicieron del Castillo de Chapultepec en 1847 durante la guerra entre México y los Estados Unidos; (día 15) el Grito de Dolores, que (en 1810) don Miguel Hidalgo y Costilla dio para iniciar el movimiento de Independencia contra la monarquía española; y la consumación de esa lucha libertaria (1821), el día 27.
Y es conveniente que quienes organizan el festejo conmemorativo precisen públicamente que refieren sólo el inicio de la gesta heroica –la que en realidad dio comienzo el 16 de septiembre por la mañana–, pues de otra forma se estaría confundiendo a nuestros niños y jóvenes.
Recurro a esta acotación sin más afán que dejar asentadas algunas fechas que por desconocimiento histórico, omisión o deliberadamente, no consideran quienes al frente están de los comités organizadores.
En fin… ningún daño les hace hojear de vez en cuando alguno de los textos que sobre la historia de México han escrito autores que jamás fincaron su pasado, presente y futuro, en la administración pública de los tres órdenes gubernamentales.
Cicuta
Varios integrantes de la legislatura local que está agonizando aspiran ser contratados para formar parte del gabinete gubernamental, donde por cierto hay varias vacantes y plazas próximas a desocuparse por disposición ‘de arriba’
Pero desde mi punto de vista, ningún legislador le garantiza nada al jefe del ejecutivo estatal para aportar más allá de su quehacer cameral, pues (él) sabe perfectamente de qué lado masca la iguana.
La reconformación del gabinete se haría luego del informe; y, por lo que preveo, en el paquete no se contemplan ex diputados.