A nombre de su bancada, el Diputado Gerardo Peña Flores presentó un Punto de Acuerdo por el cual solicitan mayor difusión al mecanismo legal para disminuir el monto de los pagos provisionales que con relación al Impuesto Sobre la Renta deben realizar mensualmente los empresarios y comerciantes a la hacienda federal.
Lo anterior, para que estos sean equitativos y justos, ya que en virtud de la contingencia sanitaria del COVID-19, en el presente ejercicio fiscal han disminuido sus ingresos, lo que genera que a muchos de los miembros del sector empresarial y comercial del Estado y en general del país, los referidos pagos les resulten elevados y desproporcionales.
“Pues estos están fijados con base en el coeficiente de utilidades del ejercicio fiscal del año próximo pasado y anteriores, lo cual materialmente no es aplicable para el presente ejercicio, toda vez que la actividad financiera de los negocios y las empresas ha ido a la baja y por ende han disminuido sus utilidades considerablementeâ€, resaltó.
El Presidente de la Junta de Coordinación Política, resaltó que este exhorto dirigido a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público y al Servicio de Administración Tributaria del Gobierno de México, también plantea que estas autoridades implementen acciones para brindar asesoría y orientación a los empresarios y comerciante.
“A fin de que estos puedan gestionar y tramitar, de manera eficiente y correcta, los ajustes de actualización inherente a sus pagos provisionales en aras de que se vean favorecidos mediante esta alternativa legal que les posibilita la realización de pagos justos y equitativos, así como hacer más eficientes los mecanismos digitales establecidos para efectuar los trámites en línea, ya que constantemente presentan fallas y están fuera de servicioâ€, puntualizó.
Peña Flores, destacó que el sector empresarial y comercial de Tamaulipas, es uno de los pilares fundamentales de la economía local y nacional, sin embargo se ha visto severamente afectado por la contingencia sanitaria, generando que muchos empresarios y comerciantes enfrenten el eventual riesgo de cerrar sus negocios por la falta de liquidez para su sostenimiento.