Francisco Medina Guerrero
Después de ser incorporados a la modalidad de Tiempo Completo, una escuela Primaria de esta Ciudad Capital fue abandonada por las autoridades, y demás que no les pagan, hasta con los gastos de un lote de gallinas ponedoras se quedaron.
Y es que de acuerdo con declaraciones del secretario de Educación Pública del Estado Mario Gómez Monroy las escuelas de Tiempo Completo siguen, pero no les pagan, y además hay que absorber los gastos y cargas de
trabajo que se tienen que hacer personalmente para enfrentar las obligaciones que les dejó dicho programa.
Tal es el caso de la Escuela Primaria «Matías S. Canales», ubicada en la colonia Tamatán de esta Ciudad Capital, donde su director afirmó que no les han pagado desde hace tiempo lo acordado por ser de la modalidad de Tiempo Completo y además él tiene que solventar los gastos de un lote de gallinas ponedoras donde se produce el huevo para los desayunos escolares de dicho plantel escolar.
El profesor Gilberto Ruiz Hernández, quien dirige la mencionada escuela, manifestó; «todo los días voy (a la escuela) porque me dejaron un criadero de gallinas y pollos para darle alimento a los niños con lo que produce y eso no entra en las cuotas y eso lo estoy resolviendo yo».
Dijo que cuando la escuela primaria Matías S. Canales entró a la modalidad de Tiempo Completo hasta le hicieron algunos arreglos, para posteriormente dejarlo solo.
«Porque cuando le entré me la pintaron muy bonita, pero ahora estoy solo», detalló.
Ruiz Hernández detalló que son más de 600 pesos semanales los que él a título personal tiene que erogar de su propio bolsillo, pues las autoridades de educación tanto federal como estatal no le han pagado nada.
«Escuché en una entrevista al Secretario de Educación que las escuelas de Tiempo Completo siguen, y sin embargo no nos pagan».
«Ahorita nos deben una quincena del ciclo pasado y no se cómo vaya a quedar eso».
Mencionó que no sabe dónde está el dinero de las escuelas de Tiempo Completo, pues se supone que desde enero la Federación mandó el recurso etiquetado para dicho rubro, sin embargo a la fecha no se ha visto reflejado en sus pagos.
Para concluir, agregó; «gasto más o menos por semana dos costales de alimento, porque son orgánicos los huevos que ponen las gallinas y entonces cada semana son 625 pesos de alimento, uno de engorda y otro de ponedora».