Por Juan Sánchez Mendoza.
La convocatoria a elección extraordinaria para ocupar el escaño uninominal que le corresponde a Tamaulipas, debe emitirse a la brevedad, en apego al marco legal que rige al Senado de la República.
De acuerdo al inciso IV del artículo 77 constitucional, a partir de que se haga la declaratoria de vacante, la cámara alta tiene 30 días para convocar al proceso comicial a celebrarse dentro de los 90 días siguientes.
Ya trascurrieron los primeros 15 días del primer término, reduciendo el tiempo del Instituto Nacional Electoral (INE) para organizar el proceso, pero sin mayores alteraciones en su proyecto, de emitirse hoy la convocatoria.
El presidente de la mesa directiva senatorial (Alejandro Armenta Mier), comentó en la víspera que este día se haría público el documento; y de ser cierto, el rejuego interpartidista comenzaría a mostrarse más plenamente al promocionarse ya de forma abierta los aspirantes al escaño.
Ese espacio legislativo no es solamente de (casi) dos años, pues cabe la posibilidad de que el ganador busque su reelección en 2024 para ampliar su presencia cameral durante un sexenio más. Hasta el 2030.
Hasta el momento, los partidos Acción Nacional (PAN), Revolucionario Institucional (PRI) y De la Revolución Democrática (PRD) ‘afinan’ la alianza ‘Va por Tamaulipas’, en tanto Movimiento Regeneración Nacional (morena) arropa al Verde Ecologista de México (PVEM) y Del Trabajo (PT), mientras Movimiento Ciudadano (MC) asegura que participaría con candidato propio (¿Juan Carlos Zertuche Romero, su coordinador estatal?).
Por la primera coalición se mueven en redes sociales Luis René Cantú Galván (a) ‘El Cachorro’, Francisco Javier García Cabeza de Vaca, Enrique Cárdenas del Avellano y Ramiro Ramos Salinas. Los dos primeros son casi propietarios del membrete albiceleste; y el otro par ex dirigentes priistas.
En torno a la segunda alianza que se ‘cuece’, ‘Juntos hacemos historia en Tamaulipas’, los morenazos llevan mano aunque pretenda ‘madrugar’ el comisionado político del PT, Arcenio Ortega Lozano, al ‘destapar’ como ‘su’ candidato a Carlos Enrique Cantúrosas Villarreal, quien fuera de su terruño ninguna presencia tiene en el resto de la entidad.
Luis Lauro Reyes Rodríguez, el delegado federal de Bienestar, está ya fuera de la jugada, pues le faltaron tamaños para renunciar al cargo porque nada le garantizaba ganar la encuesta en ciernes para designar candidato.
José Ramón Gómez Leal ‘El JR’ muestra tibieza, apostándole a que el ‘dedazo’ presidencial lo favorezca. Igual ocurre con Héctor Garza González ‘El Guasón’, mientras Maki Esther Ortiz Domínguez quiere venderle todavía ‘su capital político’ al jefe del Ejecutivo federal.
El diputado federal Erasmo González Robledo –otro de los aspirantes que han levantado la mano–, no ha podido quitarse el estigma de que fue y sigue representando los intereses de los hermanos Carmona Angulo –aún cuando Sergio fue masacrado en Monterrey (Nuevo León), hace +/-un año–, ni pudo (o no quiso) gestionar recursos federales para infraestructura, del estado, pese a presidir la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública.
Aparece también, en el escenario, Mario Alberto López Hernández, ‘La Borrega’, alcalde (con licencia) de Matamoros, quien cuenta con un capital político propio; capacidad de convocatoria; varios estudios profesionales; y liderazgo allá en la frontera, centro y sur del estado.
Prueba de su aportación electoral a morena han sido los tres procesos comiciales últimos.
De ahí, considero que sería el candidato ideal para refrendar el avance de la Cuarta Transformación en Tamaulipas.
No lo perdamos de vista.
Nuevo Laredo, otra vez
Aunque se trató de un operativo para capturar al supuesto cabecilla de una organización criminal llamada ‘Cartel del Noreste’, lo cierto es que hubo en Nuevo Laredo un suceso que paralizó, prácticamente, todas las actividades municipales.
El hecho estremeció por completo a la sociedad civil, hasta el grado de ser abordado por Andrés Manuel López Obrador públicamente.
La detención es un logro, sin lugar a dudas, de las Fuerzas Armadas.
Pero, ¿cómo evitar que ese municipio fronterizo deje de teñirse todos los días de sangre?
Han existido refriegas cotidianas y todo tipo de violencia, extorsiones y secuestros; cobro de piso, venta de estupefacientes y muertos, sin que sea esto denunciado por la alcaldesa Carmenlilia Cantúrosas Villarreal, ante las instancias federales de seguridad pública.
Al permitir dejar pasar y hacer como que no sabe del problema, la edil se convierte en cómplice. ¿Hasta cuándo le caerá el veinte?
Correo: jusam_gg@hotmail.com