Francisco Medina Guerrero
CIUDAD VICTORIA.- Para frenar el “huachicoleo” del agua, se fiscalizará la explotación que realizan del vital líquido los concesionarios de aguas nacionales, ya que “cada quien saca lo que puede, lo que quiere, o necesita”, reveló el Director de la Comisión Estatal del Agua de Tamaulipas (CEAT) Raúl Quiroga Álvarez.
“Tú tienes un título de concesión para extraer un litro por segundo de agua del subsuelo y sacas diez, pues no pasa nada porque nuestra entidad y toda la federal no tiene personal suficiente ni mínimamente para tener esos ‘dientes’ que se requieren para poder decir te voy a multar porque tienes derecho a un litro nada más“.
En conferencia de prensa, el titular de la CEAT agregó; “ya lo dijo el Gobernador, vamos a tratar junto con la Comisión Nacional del Agua de llevar a cabo un programa de telemetría, vamos a poner un medidor que me esté diciendo a mí cuánto estás extrayendo en tiempo real”.
Incluso, dijo
Quiroga Álvarez, la Ley de Aguas Nacionales establece los montos de las multas para quien incurra en “huachicoleo” del agua u otras irregularidades.
“Habla de salarios mínimos, viene una variación enorme, si haces esto te cobro tantos salarios mínimos, depende de si eres reincidente, si estás extrayendo mucha más agua, si tenías el título vencido, en fin, ahí se puede consultar”.
Cabe señalar que Quiroga Álvarez señaló que el tema de fondo es que hay una mala administración del agua ya que dijo, proliferaron nuevos aprovechamientos a todo lo largo del Río Bravo y en los afluentes desde que se publicó el Decreto de Facilidades Administrativas en 1995.
“De tal manera que ya no ha escurrido el agua que escurría históricamente al cauce principal”.
“Es increíble, pasando incluso sobre la Ley de Aguas Nacionales se otorgaba un título de concesión a todo aquel que bajo el simple hecho de protestar que decía verdad se le otorgaba un título de concesión, sin observar que hubiera disponibilidad del recurso, sin respetar que es una cuenca binacional ”, dijo para concluir.
Cabe señalar que la proliferación y sobre explotación de las concesiones ocasiona un déficit de 600 millones de metros cúbicos de agua en la Presa Falcón, poniendo en riesgo el abasto al Distrito de Riego 025.