Nueva York. El juicio de Genaro García Luna podría culminar la próxima semana con los argumentos de cierre por parte de los fiscales y la defensa -y con la posibilidad de que el acusado decida testificar en su propia defensa- y con ello entregar el destino del acusado al jurado, indicó el juez federal Brian Cogan.
En un giro que sorprendió hasta a los abogados defensores, los fiscales anunciaron al juez en la Corte hoy que podrían concluir con su presentación del caso el lunes convocando a un último testigo importante y estar preparados para ofrecer sus argumentos finales al jurado.
César de Castro, uno de los abogados defensores, expresó su sorpresa al juez Cogan, comentando que las indicaciones de la fiscalía “eran de ocupar 24 días de juicio, y apenas van, con el de hoy, ocho”, y que eso obligaba a la defensa repensar de inmediato sus próximos pasos.
Preguntados por el juez sobre si la defensa está contemplando presentar testigos incluyendo a su propio cliente, De Castro comentó que por ahora “no pensamos que cualquiera otro además de García Luna” será convocado por ellos a declarar.
El juez Cogan indicó que si el acusado testifica, lo hará el martes y la fiscalía deberá ser informada por la defensa de eso el lunes. Agregó que si el gobierno concluye su caso el lunes y el acusado decide no testificar, “definitivamente cerraremos esta próxima semana” – en referencia a las audiencias de presentación de evidencia y testigos.
Si no hay un cambio de curso, todo indica que el juez espera que la fiscalía y la defensa presenten sus argumentos resumiendo sus posiciones ante el jurado, que el jurado reciba instrucciones del juez sobre su tarea, y que con ello el jurado inicie sus deliberaciones a puerta cerrada y sin tiempo límite para llegar a un veredicto sobre cada uno de los cinco cargos que enfrenta García Luna.
Lo que podría alargar el juicio y una decisión que podría ser clave es si García Luna decide sentarse en el banquillo de testigos para declarar en su propia defensa. En general, abogados defensores aconsejan a sus clientes no hacerlo ya que serán sometidos a un contra-interrogatorio por los fiscales donde podrían quedar vulnerables y hasta cometer perjurio.
El giro abrupto en el juicio -lo cual potencialmente reduce a la mitad el tiempo pronosticado de duración de dos meses- detona especulación sobre las razones por las cuales los fiscales no estarán presentando a más de su total de 76 testigos que habían informado a la defensa como potenciales -contando a los de este día solo han convocado a 25. No se sabe por ahora quién será el ultimo testigo/a.