CIUDAD DE MÉXICO (apro). – La venezolana Ana Rosa Mavarez, de 31 años, murió por complicaciones durante una liposucción “poco invasiva”, en la Unidad de Cirugía Ambulatoria Marina Plaz, ubicada dentro de un centro comercial, en Cumaná.
Dejó dos hijos de ocho y once años, quienes esperaron a su madre el 26 de febrero, un día después de que ella fue sometida a la cirugía.