Intríngulis
Por Juan Carlos López Aceves.
Relata el Canciller Mexicano, que su familia “nunca imaginó que aquél título de Licenciado en Relaciones Internacionales por el Colmex, que obtuve en 1981, sería finalmente colgado en una oficina as hoc” (p.205).
Antes de continuar con esta penúltima entrega, le comento que al inicio de su libro “El Camino de México”, MARCELO LUIS EBRARD CASAUBONtiene un apartado sobre lo que “Dicen de mí”, en donde cita tres expresiones.
“Este señor (Marcelo Ebrard), es un experto, un estratega, un diplomático, pero además no solo es diplomático, es un buen político, o sea, reconocido y es mi hermano”, son palabras del Presidente LÓPEZ OBRADOR.
“De Marcelo admiro mucho lo que hizo en el encuentro de López Obrador con Biden”, expresión de ELENA ELIZABETH LUISA AMELIA PAULA DOLORES PONIATOWSKA AMOR.
“Marcelo algún día va a ser presidente”, dice ÓSCAR MANUEL ARGÜELLES DORANTES, quien formó parte de la Comisión para la Paz y Reconciliación en Chiapas, encargado de las relaciones con la prensa nacional y extranjera, así como de la logística del Comisionado MANUEL CAMACHO SOLÍS.
Al abordar “Mi ahora”, EBRARD CASAUBON narra las primeras acciones que encabezó como Secretario de Relaciones Exteriores, como el nuevo Tratado de Libre Comercio firmado por el Presidente LÓPEZ OBRADOR y la relación con DONALD JOHN TRUMP.
“Acabó con la diplomacia tradicional. Su cancillería era su celular y su cuenta de Twitter el vocero y embajador más eficiente”, dice el Canciller Mexicano sobre el Presidente Norteamericano (p.205).
“Soy un negociador nato. Es de mi soft skills que pondría en mi currículo”, nos dice sin modestia alguna MARCELO LUIS, al abordar la amenaza de crisis provocada por DONALD JOHN TRUMP,al anunciar el cobro de aranceles de 5% a todoslos productos mexicanos de exportación (p.214).
Revela MARCELO LUIS, que un funcionario de la Secretaría de Salud lo tildó de “ingenuo”, cuando comentó que había leído un artículo sobre China y la rapidez con la que desarrollaban la vacuna “CanSino” (p.223).
Cuenta también que, a finales de marzo de 202O, un sábado por la tarde, le llamó el Presidente LÓPEZ OBRADOR para una reunión en Palacio Nacional, con ZOÉ ROBLEDO ABURTO, OLEGARIO VÁZQUEZ RAÑA y JAVIER POTES GONZÁLEZ, para buscarle solución a la saturación de las áreas de terapia intensiva de los hospitales públicos.
“Andrés Manuel me pidió que tomara en mis manos la iniciativa de firmar un convenio inédito, que liberara camas en el sector público para atender a más pacientes con covid-19 y derivar a clínica de hospitales privados a pacientes sin covid-19” (p.228), que derivó en el programa “Juntos por la Salud”.
Páginas más adelante, EBRARD CASAUBON narra que recibió una llamada de CARLOS SLIM HELÚ, en la que el empresario le comentó el proyecto de apoyar al laboratorio AztraZeneca y a la Universidad de Oxford, para acelerar la investigación de la vacuna mexicana.
“Cuando Slim me platicó de su proyecto lo escuché tan esperanzado, ilusionado y enfocado en esta idea, que recordé aquella mañana en la reunión del gabinete donde a muchos de la mesa les parecía un sueño guajiro lo que les había contado de las vacunas chinas” (p.235).
Al referirse a la necesidad de que México cuenta con una política exterior propia, no alineada en automático con los intereses económicos de USA, el Canciller Mexicano propone hacer “cosas chingonas” (p.262).
“No había sido así en este siglo hasta el triunfo de Andrés Manuel y mi llegada a la Cancillería”, sostiene sin modestia alguna MARCELO LUIS(p.266), al comentar la inasistencia del Presidente LÓPEZ OBRADOR, a la Cumbre de las Américas, por la exclusión de Cuba, Venezuela y Nicaragua.
Durante la lectura del libro, se aprecia el énfasis de EBRARD CASAUBON sobre la paridad y la igualdad de género.
“En nuestra gestión asumimos una política exterior feminista…en todos los consulados de instaló una Oficina de Género…lanzamos el Fondo Ellas en el evento Generación Igualdad 2022…Entendemos la paridad como la otra gran transformación simultánea a la igualdad social” (pp. 269 y 279).
Finalmente, antes de concluir esta entrega, EBRARD CASAUBON menciona en una sola ocasión a BEATRIZ GUTIÉRREZ MÜLLER, al hablar sobre la repatriación de objetos arqueológicos, que ha sido “preocupación principal de la doctora Beatriz Gutiérrez” (p.271).