Al asistir a la Convención Nacional del Partido Verde, el zacatecano recriminó a los dirigentes de ese instituto, con el que reinició su carrera política, que antes lo respaldaban y ahora han mostrado distancia.
«Me reuní con los diputados federales del Verde, con Carlos Puente y con Karen (Castrejón) y les dije: no carguen los dados ustedes todavía, aún van a pasar muchas cosas», soltó.
Sin decir hacia qué corcholata, Monreal bromeó que le reclamó a Arturo Escobar y Javier Casarín, diputado que abiertamente respalda a Marcelo Ebrard, estar «muy inclinados».
Recordó que antes el senador Raúl Bolaños lo acompañaba a sus giras y ahora siempre le dice que no tiene tiempo.
«¿Cómo ya cambiaste, Raúl? ‘Es que ya tenemos caballo negro’ (le respondió). Los entiendo, antes me apoyaba el senador Manuel Velasco y ahora me dice: ‘no compadre, cada uno por su lado’. Por eso les digo, deben de escucharnos», dijo.
Aseguró que entiende que el PVEM haya decidido lanzar como «corcholata» al senador Velasco como una estrategia para entrar a la negociación rumbo al 2024.
Sin embargo, insistió, los pevemistas en todo el País deben esperar para determinar a quién van a apoyar, pues un partido moderno es tolerante, no acepta imposiciones y analiza todas las opciones antes de decidir.
Durante el encuentro, le preguntaron qué lo hace diferente a los otros aspirantes, por lo que, entre risas, respondió que, sin falsa modestia o arrogancia, es el mejor.
«El más preparado, nadie ha podido conquistar tres veces un distrito electoral de mayoría, he sido tres veces senador, Gobernador de Oposición contra todo pronóstico con la alianza PRD-PVEM, tengo experiencia desde el Poder Legislativo, pero también el Poder Ejecutivo», enlistó.
«Tengo 42 años de experiencia política y los miro a la cara porque no he tenido ni una sola denuncia de malversación de fondos, abuso de autoridad, no he tenido ni siquiera una infracción de tránsito, respeto la ley, soy esclavo de la ley. Me siento con la capacidad plena, estoy con mi lucidez al 100 por ciento».
Pero sobre todo, argumentó, es autónomo, independiente, no es dogmático ni fanático, y puede garantizar que es un hombre libre, pero leal a lo que piensa.
«Por eso decidí luchar con Andrés Manuel en Morena y voy a luchar, no voy a traicionar ni al pueblo ni al movimiento, voy a luchar a la buena», remató en medio de aplausos.
Aseguró que para él, la transición política que comenzó en el 2018 está inacabada, por lo que se deben incrementar las acciones.
Reconoció que existe una crispación social y no le agrada el desencuentro entre poderes que se está dando.
Tampoco, dijo, puede aplaudir los interminables excesos de los poderes, por ello, aseveró, impulsa la reconciliación.