Madre de joven que abortó en ISSSTE acusa de negligencia y que no entregan al feto

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Francisco Medina Guerrero

CIUDAD VICTORIA.- De nueva cuenta se presenta en esta Capital un caso donde no quieren hacer la entrega de un óbito fetal, y ahora es en el Hospital del Issste.

Fue una madre de familia quien además acusó al personal del Hospital del Issste de presuntos actos de negligencia médica.

“Yo lo estoy platicando porque es mi dolor, es el dolor de mi hija, ella ahorita está destrozada por todo lo que vivió, de las enfermeras tuvo buen trato, el último ginecólogo que la atendió y el primer ginecólogo que la atendió no tengo queja tampoco, sí quiero que se sepa lo que ella vivió y quiero que le regresen a su bebé”, refirió Rosy Valdez, madre de Julissa Sarahí, quien sufrió un aborto expontáneo y fue atendida en dicho nosocomio.

“La problemática que estoy enfrentando es que tengo a mi hija de 26 años que estaba embarazada, sufrió un aborto pero a mí lo que no nos gustó fue el trato que le dieron a ella”, relató Rosy Valdez.

Al ser entrevistada en el exterior de la Clínica Hospital del Issste, la mujer manifestó que de ser necesario acudirá a instancias judiciales para exigir la entrega del producto del embarazo de su hija.

“La indignación que yo siento es mi hija era su primer bebé, su ilusión, la meten a toco y en toco no le ponen ni siquiera una anestesia para empezarla a checar”.

La ama de casa manifestó que después de ingresar el domingo, a las 7:00 del lunes se le salió por completo el bebé a su hija y la enfermera le dijo al doctor que se regrese a checarla y el doctor le dijo que no, que hasta el siguiente turno, que era hasta las 8:30.

“Entonces mi hija estuvo con todo eso de fuera, empiezan a llegar los practicantes y como a las 7:10 empiezan a checarla, esos practicantes no sabían, la enfermera les dice chécale, córtale, y el practicante le dice qué le corto, yo no sé qué cortarle”.

Al seguir con su declaración, dijo que la enfermera no se movía, ni siquiera se levantaba a hablarle a los demás doctores o algo, y dejaba a los estudiantes que hicieran las cosas.

“Cómo le va a estar cortando si no sabe, al momento en que uno de ellos le quiere cortar le corta a ella, ella grita del ardor que sintió y ahí la dejan, ya no intentan nada”.

Al continuar narrando la forma en que sucedieron los hechos añadió; “logran agarrar al bebecito, lo ponen en la báscula, ella dice que cuando nació el bebe sintió que se movió, entonces sale el bebecito y los practicantes jugaban con él, decían parece gelatina”.

Dijo que su hija había pedido que le dieran a su niño porque quería darle bendición y cremarlo, pero le empiezan a decir que no.

“Mi pregunta es murió de qué, murió porque el muchacho jugó con él, porque lo aventó de cabeza en un frasco, mi hija escuchó el tronido, escuchó cuando tronó el bebé al aventarlo al frasco”.

“Al parecer todos se reían, la enfermera le dice al practicante cómo lo vas a aventar de cabeza, mételo bien, y se ríe y dice, es que no sé cómo meterlo, y lo avienta, lo deja caer y tronó el bebé estando en el frasco”.

Por último, y tras recalcar que exigirá la entrega del cuerpo de su bebé, dijo; “mi indignación es esa, que se sepa lo que ella vivió, yo como madre estoy muy dolida aparte por perder el nieto por lo que ella sufrió, quiero que se le entregue su bebé porque es parte de ella, es de ella, salió de ella, y ellos lo deben de entregar, tenía 20 semanas, ellos lo manejan como 13 semanas porque el bebé estaba chiquito”.

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