Intríngulis
Así como la candidatura de CÉSAR VERÁSTEGUI OSTOS representó para el PAN, una caída respecto a la votación obtenida por FRANCISCO GARCÍA CABEZA DE VACA en la elección gubernamental de 2016, lo mismo sucedió con la aportación del voto azul al triunfo de MANOLO JIMÉNEZ SALINAS en Coahuila,contrastando con los obtenidos por GUILLERMO ANAYA LLAMAS en 2017, cuando la alternancia se quedó a 2.96 puntos de concretarse y sin necesidad de alianzas con otros partidos político.
Es conveniente hilvanar lo que sucede en Tamaulipas, con los resultados de las elecciones gubernamentales que se realizan en otras entidades del país, con la finalidad de detectar tendencias rumbo al 2024.
Para ello, tenemos que recordar lo que sucedió en nuestro estado en 2016, cuando CABEZA DE VACA y sus “vientos de cambio”, arrollaron en las urnas al candidato del PRI.
BALTAZAR MANUEL HINOJOSA OCHOA tenía perdida la elección, porque la ciudadanía tamaulipeca estaba harta del PRI-Gobierno y ávida de lograr la primera alternancia en el Poder Ejecutivo.
CABEZA DE VACA le ganó a HINOJOSA OCHOA, sin coalición alguna, en cada uno de los 22 Distritos Electorales de Tamaulipas, haciendo que EGIDIO TORRE CANTÚ fuera el primer mandatario priista en entregar la estafeta a un candidato de la oposición.
La diferencia final entre las candidaturas del PAN (721,049) y la coalición del PRI, PVEM y Nueva Alianza (517,609), fue de 203,440 votos: CABEZA DE VACA obtuvo el 50.14% de la votación y BALTAZAR el 35.99%.
Pero los votos marcados solamente en el recuadro del PRI, es decir, dejando fuera a los del PVEM y PANAL, sumaron 486,124.
Seis años más tarde, AMÉRICO VILLARREAL ANAYA concreta la segunda alternancia gubernamental cosechando 730,864 votos, que representaron el 50.27% de los sufragios emitidos en la elección de 2022.
Elección calificada por VILLARREAL ANAYA como de “Estado”, por la ilegal intromisión del ex mandatario y su funcionariado, que le valió a CABEZA DE VACA una serie de sanciones por parte del IETAM.
Juego sucio que no pudo detener la esperanza de cambio, representada por el candidato de MORENA- PT y PVEM.
Finalmente, la candidatura de CÉSAR VERÁSTEGUI OSTOS logró sumar 642,433 votos, de los cuales el 86.7% los aportaron los recuadros del PAN, el 10.1% los del PRI y los del PRD el 3.2%.
Pero los votos del PAN sin coalición fueron 548,694, representando una caída de 172,355 respecto a los de CABEZA DE VACA en 2016.
Viene a cuento lo anterior porque, de acuerdo al PREP, en la elección de Coahuila el candidato de la alianza PAN, PRI y PRD cosechó 741,731 votos, de los cuales el 83.1% los aportó el Revolucionario Institucional por sí solo y el 12.1% provinieron de Acción Nacional.
Tomando como referencia los votos sin coaliciones, el PAN obtuvo solamente 89,473, representando una caída de 296,624 sufragios, sobre los 386,097 que recolectó GUILLERMO ANAYA LLAMAS sin alianzas, en la elección gubernamental de 2017 ganada por MIGUEL ÁNGEL RIQUELME SOLÍS.
Así anda, cascabeleando, el torque del PAN enTamaulipas y Coahuila, dos estados que son parte de la Segunda CircunscripciónPlurinominal, por la que CABEZA DE VACA busca el fuero constitucional que tiene una diputación por el principio de representación proporcional.
Destacando que, el partido que dirige LUIS RENÉ CANTÚ GALVÁN, tiene un récord negativoen la elección de diputaciones federales, pues entre 2018 y 2021, el PAN perdió 20,997 en los 9 Distritos Electorales de Tamaulipas (que serán ocho en 2024), al pasar de 536,981 a 515,984 votos.
Mientras el PAN pierde levadura en las urnas de Tamaulipas, el partido del Presidente LÓPEZ OBRADOR gana terreno.
Pues además de la gubernatura de AMÉRICO VILLARREAL ANAYA, gana la elección de diputaciones federales, en donde MORENA pasa de 518,548 a 573,271 votos entre 2018 y 2021.
Un escenario ad hoc para MORENA rumbo a los comicios de 2024, en donde todo indica que la incertidumbre que tendremos, será saber por cuántos votos ganará la Presidencia de la República, la candidata o candidato que tenga el visto bueno del Presidente LÓPEZ OBRADOR.
Es decir, CLAUDIA, ADÁN o MARCELO.