Golpe a golpe
Por Juan Sánchez Mendoza
La popularidad que Bertha Xóchitl Gálvez Ruiz consiguió durante poco más de dos meses a raíz de su pleito con Andrés Manuel López Obrador, tiende a desvanecerse. Totalmente.
Y eso lleva a suponer que en el Frente Amplio por México (FEM) ya se contempla sustituirla (como su precandidata presidencial) por Beatriz Elena Paredes Rangel, quien cuenta con una larga trayectoria política, aunque ha estado siempre pegada a la ubre gubernamental, como funcionaria pública, actividad partidista e integrante del Poder Legislativo.
Por lo pronto, el posicionamiento de Xóchitl ha caído drásticamente del ánimo ciudadano por 1) la investigación que realiza la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) acerca del plagio de su tesis; y 2) el lenguaje ordinario que utiliza cotidianamente, pues de picaresco se tornó vulgar.
Las estadísticas de las encuestas más recientes refieren puntualmente su pérdida de simpatía. Y fuera de toda agresión oficialista –que la hay–, la percepción popular coincide en que no es la mejor opción para derrotar a la mentada Cuarta Transformación.
Sobre todo, cuando un día sí y al otro también, aparecen nuevas faltas al marco legal cometidas por la senadora en su desarrollo empresarial, que dejan al descubierto su connivencia con regímenes panistas.
Al iniciar su búsqueda de la candidatura presidencial de la alianza que conforma el PAN con el PRI y el PRD a Xóchitl se le estimaba como opción para frenar la política populachera del mentado ‘Peje’, pero, conforme pasa el tiempo, desilusionada cada vez más a las clases emergentes que, son, a decir verdad, los núcleos más golpeados por el tabasqueño.
Ahí están los medianos empresarios, maestros, comerciantes y padres de familia, con hijos en colegios privados –a falta de cobertura en escuelas públicas, aunque se diga que éstas tienen capacidad suficiente–, que cada mes deben tributar parte de sus ingresos a diferencia de núcleos a quienes se les brindan apoyos por no trabajar ni estudiar, por ejemplo.
En fin –para no desviarnos del tema central–, le comento que asoman ya entre los jerarcas de los membretes albiceleste y tricolor (Marko Antonio Cortez Mendoza y Rafael Alejandro Moreno Cárdenas) claras diferencias o posiciones encontradas sobre la permanencia de Xóchitl como constructora del FAM.
Al cabecilla del partido del Sol Azteca, José Jesús Zambrano Grijalva, por cierto, ni siquiera lo toman en cuenta.
Así que no descarte una sustitución de candidata por el FAM, antes de iniciar el plazo para el registro formal de candidaturas presidenciales.
Claudia no crece
La inversión oficialista para posicionar a Claudia Sheinbaum Pardo ha sido, es, dispendiosa, según se ha visto en los eventos promocionales donde se ha parado.
Pero no crece, pues su duro rictus al electorado nada le transmite.
Da la impresión de que todo le parece mal o que está a la fuerza como coordinadora de los comités de defensa de la mentada 4T.
También pudiera ser que anda ‘inquieta’ ante la resolución del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, que le dio la razón a Marcelo Luis Ebrard Casaubón de que sus derechos políticos fueron violentados, en el proceso interno de Movimiento Regeneración Nacional (morena).
Difícilmente la jerarquía del membrete guinda, encabezada por Alfonso Durazo Montaño (presidente del Consejo Nacional) y Mario Martín Delgado Carrillo (dirigente del Comité Ejecutivo Nacional), aceptarían la ‘sugerencia’ de reponer el proceso selectivo –es decir, la encuesta–, como lo demanda el ex canciller, aunque la Comisión de Honestidad y Justicia partidista ya le aceptó (a la fuerza) su impugnación.
En el tramado político-partidista, hay muchos recovecos que buscarían los mandones de morena –por instrucción directa de Andrés Manuel López Obrador, delo por seguro–, para evitar que Marcelo se salga con la suya. Y les eche a perder el proyecto que durante años ha construido el presidente para su propio relevo.
Más cuando se trata de un ‘peje’ ladino que no admite más verdad que la suya.
Lo ve usted cuando dice siempre tener otros datos.
Cicuta
Durante varias horas, ayer, se cayó la internet.
Y callaron, al menos mediáticamente, los políticos.
No por eso se dejaron de pisar callos.
Como corresponde a la prensa objetiva, que no calla ante la caída de quienes pretenden acallarla.
¿Qué pasó?
¿Ocurrió sólo en Ciudad Victoria o en todo Tamaulipas?
¿Acaso a lo largo y ancho del país?
Lo peor del caso es que igual se paralizaron el sistema administrativo del sector público y muchas actividades del privado.
Correo: jusam_gg@hotmail.com