La demanda de boletos para el Supertazón 58 de la NFL en Las Vegas registra un aumento en comparación con el mismo periodo del año pasado, afirmó un portavoz de StubHub, plataforma estadunidense de intercambio y reventa de pases. La tendencia también es más alta que el pasado enfrentamiento entre Jefes de Kansas City y 49ers de San Francisco en 2020, cuando definieron otra final de campeonato.
El precio promedio para el partido del domingo fue de 8 mil 700 dólares (149 mil 186 pesos) hasta el martes. Los especialistas esperan que las cifras alcancen su punto más alto hoy, tres días antes del juego, ya con la presencia de un número más amplio del total de visitantes estimados (330 mil) que llegarán este fin de semana a la ciudad.
Puntos de venta
Es difícil especular si el volumen de transacciones aumentará cuando se acerque el superdomingo, pero ciertamente no es algo sin precedentes, señaló el sitio de distribución de boletos.
Otro punto de venta en línea, TickPick, informó que el promedio del precio de compra fue de 9 mil 800 (168 mil 65 pesos), según un informe de medios estadunidenses. Durante años, la NFL y otros grandes deportes profesionales, con la notable excepción del boxeo, mantuvieron distancia con Las Vegas, recelosos de que se les asociara con las casas de apuestas y la imagen desmedida de sus negocios.
Pero ahora los tiempos son otros. En medio de un amplio despliegue de luces que iluminan las calles y principales edificios, cualquier aficionado que desea conseguir boletos para el domingo aguarda con paciencia una reducción en los precios a medida que se acerca la hora.
El mayor riesgo que corren es comprar entradas no verificadas, advierten las autoridades sobre la gran cantidad de boletos falsos que suelen ser detectados en los controles de seguridad del estadio.
El acceso más barato en la plataforma TickPick hasta ayer era de 8 mil 384 dólares (143 mil 747 pesos) mientras el más caro alcanzaba un techo de 41 mil 770 (716 mil 163 pesos).
El único juego en el que hemos visto mantenerse los precios fue exactamente Kansas City-San Francisco de 2020 en Miami, explicó el vicepresidente de desarrollo del sitio, Matt Ferrel.
En algunos casinos, incluidos los fastuosos Bellagio y Aria, el costo promedio de una habitación durante el fin de semana superó el martes los mil 400 dólares por noche de viernes a domingo (24 mil pesos). Y las 37 mil habitaciones de las 12 propiedades de MGM Resorts International se vendieron por completo para la noche del sábado.
Un paraíso económico
A partir del regreso de la Fórmula 1 el año pasado y de una apertura histórica de la NFL para celebrar el encuentro más importante de la temporada en el futurista Allegiant Stadium, casa de los Raiders, otros deportes preparan su aterrizaje en Las Vegas. También desde Oakland, los Atléticos recibieron en noviembre la aprobación de las Grandes Ligas para empezar a jugar en un inmueble nuevo en 2028.
El comisionado de la NBA, Adam Silver, reveló a su vez que esta ciudad será una de las sedes principales de la liga de basquetbol para su esperada expansión por Estados Unidos. Como resultado, el negocio de la venta de entradas se multiplicó también en otros ámbitos del entretenimiento y la vida social de sus visitantes.
Por 580 dólares (9 mil 943 pesos), la Ccttle Vegas ofrece la oportunidad de vestirse con las camisetas de su equipo y casarse con un oficiante caracterizado de árbitro. Fuera del popular Strip, se agotaron los boletos de 149 dólares (2 mil 554 pesos) para una fiesta el día del partido en el Jackpot Bar & Grill, un pub diseñado para los fanáticos de los Jefes de Kansas City.
Entre las fiestas planificadas más importantes se encuentra la Maxim Casino Royale Experience, en la que un fin de semana equivale a un gasto de alrededor de un millón de dólares e incluye transporte en jet privado, 75 mil dólares en créditos de juego y 10 mil dólares por noche en créditos para cenar en los restaurantes del Resorts World, de acuerdo con información de Ap.