Por: Redacción LPMx
El presidente Andrés Manuel López Obrador destacó la necesidad urgente de reformar el Poder Judicial debido a la «gran corrupción» presente en esa esfera de la Unión. Expresó que el sistema judicial está «secuestrado» tanto por la delincuencia organizada como por la delincuencia de cuello blanco, y enfatizó que no está al servicio del pueblo.
Confiado en que antes de que finalice su administración, en septiembre, esta reforma pueda ser discutida y eventualmente aprobada, el presidente afirmó que el nuevo Congreso podría encargarse de ello. Destacó que septiembre, siendo el mes de la patria, sería propicio para llevar a cabo esta reforma crucial.
López Obrador llamó al Congreso de la Unión a convocar foros y debates necesarios para iniciar la discusión sobre la reforma constitucional del Poder Judicial. Esta iniciativa es una de las prioridades para su eventual sucesora, Claudia Sheinbaum.
Interrogado sobre la oposición a esta reforma, el presidente señaló que son los «poderosos» quienes se oponen, ya que no desean que el pueblo elija a los jueces, magistrados y ministros. Cuestionó por qué temen a la democracia.
En cuanto al nerviosismo en los mercados debido a esta iniciativa, López Obrador aseguró que la economía nacional sigue siendo sólida. Destacó que durante su mandato, el peso no se ha devaluado, sino que se ha fortalecido.
Presentando un balance de los sexenios neoliberales, el presidente resaltó que con su administración el peso ha ganado un 10% de valor. Contrastó estas cifras con las de administraciones pasadas, donde el peso sufrió devaluaciones significativas.
López Obrador concluyó afirmando que su gobierno pasará a la historia como aquel que no devaluó la moneda, desafiando así los esquemas de chantaje basados en mantener privilegios bajo amenazas de fuga de capital y devaluaciones monetarias.