Con una extraordinaria actuación de Carlos González, Pumas rescató el empate 3-3 ante un peligroso Tigres en un vehemente partido. El plantel de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) llegó a 23 puntos y se mantiene en los primeros puestos, al tiempo que los norteños se quedaron con 19 unidades al límite de la zona de clasificación, en la jornada 13 del torneo Apertura 2018.
Carlos González (7, 45, 62) fue el héroe de Pumas al marcar un triplete para equilibrar los goles de Eduardo Vargas (23), Rafael Durán (32) y André-Pierre Gignac (47) en el estado Olímpico Universitario.
En pocos minutos, Pumas lanzó el primer zarpazo al aprovechar un descuido del arquero visitante. Felipe Mora sorprendió a la zaga norteña al filtrarse por el costado derecho y mandar un disparo que obligó al guardameta Nahuel Guzmán a salir para detener el ataque. El balón quedó vivo y González rescató un rebote para definir frente a las redes.
La escuadra dirigida por Ricardo Tuca Ferretti no decayó y en pocos instantes acechó la meta de los locales. Guido Pizarro estuvo cerca de marcar con un cabezazo que pasó a centímetros del palo derecho.
Con una jugada de gran velocidad y precisión, Tigres consiguió la igualada. Javier Aquino mandó un pase a Vargas, quien desequilibró a los locales y al llegar a la media luna lanzó un potente disparo que superó a la defensa para entrar a las redes.
Pumas no se replegó y con astucia buscaba recuperar la ventaja, pero el plantel de la Universidad Autónoma de Nuevo León también era férreo en el ataque. Los aficionados alentaban a la escuadra local con el clásico Goya, mientras en el banquillo el técnico David Patiño miraba con preocupación el duelo.
Rafael Souza asustó al conjunto de la UNAM con un potente tiro de larga distancia, el cual fue atajado por Alfredo Saldívar. El ataque fue tan sólo un aviso, pues la escuadra norteña persistiría.
Aquino había descubierto el punto débil de los auriazules y de nueva cuenta se filtró por el lado izquierdo, envió un centro y Durán remató a quemarropa dentro del área.
El duelo se mantuvo por instantes bajo el ritmo que imponían los norteños, al tiempo que Pumas fue más sigiloso y esperaba un error del rival para el contragolpe.
Saldívar rescató a su equipo al detener con un manotazo un disparo de Durán a escasos metros de la portería. Cuando parecía que Tigres se iría al vestidor con el partido en su favor, la escuadra de la UNAM reaccionó para emparejar los cartones.
Pablo Barrera mandó un fino pase y González remató con tiro de volea desde el centro del área para poner el 2-2. La fiesta resonó en el estadio, el gol daba esperanza para evitar la derrota.
Al inicio del complemento, André-Pierre Gignac sorprendió con un zarpazo. En una extraordinaria jugada, Aquino quebró a la zaga local para mandar un centro al ariete francés, quien remató con disparo de pierna zurda y puso el 3-2.
Pumas no se dejó intimidar y bajo una intensa lluvia emparejó el marcador. González anotó su tercer tanto con un remate de testa pegado al poste izquierdo, tras un pase de Barrera. La afición local se desvivía en la celebración, mientras Ferretti veía con molestia el encuentro.
El empate desató un duelo dinámico en los últimos minutos, ninguno de los dos equipos estaba dispuesto a ceder. Julián Quiñones presionó con un disparo desde el palo derecho, pero Saldívar salvó a los locales con otra gran atajada.
Quiñones sorprendió a Saldívar con un disparo cruzado, los Tigres ya celebraban el gol, pero el silbante César Arturo Ramos Palazuelos recibió una señal del videoarbitraje y aunque no consultó la revisión de la jugada anuló el tanto al marcar fuera de lugar.
Ismael Sosa y Luis Rodríguez intentaron romper el empate, pero Saldívar se mantuvo firme y evitó que los Tigres consiguieran el triunfo.