El número de víctimas fatales por la explosión de una toma clandestina en Hidalgo subió a 89, indicó el secretario de Salud, Jorge Alcocer, en conferencia de prensa junto al presidente Andrés Manuel López Obrador.
Este lunes, en Palacio Nacional, el funcionario federal precisó que las víctimas fallecieron durante la madrugada de hoy en distintos hospitales. Además, hay 55 heridos que siguen siendo atendidos, ya incluidos los pacientes enviados a Estados Unidos.
El domingo por la tarde, el gobernador de Hidalgo, Omar Fayad, informó que en el lugar del siniestro se encontraron 68 restos humanos, de los cuales han sido identificado nueve, y siete de ellos ya fueron entregados a sus familias.
Además, se cuenta con 54 muestras genéticas que permitirán la identificación de cadáveres, ya sea con peritos en México o, si es necesario, del extranjero.