En la zona temporalera de El Mante se implementará un operativo para cerrar todos los negocios que estén fuera de la ley, dijo el Secretario General de Gobierno.
Por: Arturo Martínez
En la reunión que se realizó este jueves en las inmediaciones del Castillo de Nueva Polonia, donde participaron autoridades estatales, municipales y ejidales, en representación de los habitantes de la zona habló Gabriel Anaya, y uno de los temas que se expusieron, considerado como “rasposónâ€, fue relacionado por la venta de bebidas embriagantes en la temporalera, que se conforma por 66 ejidos.
Anaya Fernández, explicó que los Consejos Vecinales se encuentran con el problema de que antes tenían un solo lugar donde se expedían bebidas “sabrosasâ€, pero actualmente hay ejidos que tienen cuatro o cinco negocios de este tipo. Algunos con licencia, pero la mayoría no.
Agrego que antes, para que una cantina se instalara en un ejido, se necesitaba la anuencia de la asamblea que le ordenaba al comisariado entregar el permiso, de tal forma que el dinero que recaudaba la junta de mejoras se invertía en el pueblo.
Sin embargo, ahora, con tantos negocios dedicados a la venta de bebidas embriagantes ya no se puede. Ya que antes la cervecería negociaba con la junta vecinal, pero actualmente no le interesa, porque tienen más opciones (cantinas) donde puede vender.
“Que le pedimos a usted (Secretario General de Gobierno), que revise y quien no tenga su permiso cuello, y el que lo tenga, también revisarlo para pedir la anuencia del comisariadoâ€, detalló Gabriel Anaya.
En su intervención, el Secretario General de Gobierno de Tamaulipas, César Augusto Verástegui Ostos, refirió que este es un problema de origen y que se ha venido “distorsionandoâ€, y lo único que le ha dejado a los gobiernos estatales y municipales “son problemas que origina el alcohol y no deja ningún beneficio a la sociedadâ€.
“Hago el compromiso, aquí traigo la relación de todos los permisos y le hago entrega al alcalde (Mateo Vázquez) para que se haga un operativo y se cierre todo aquel negocio que este fuera de la ley, sin distinción, y darle la oportunidad al ejido que pueda decidir con quién se quedaâ€, sentenció Verástegui Ostos.