No tenemos la Culpa

0
12

DESDE ESTA ESQUINA.

MELITON GUEVARA CASTILLO.

01.07.202.

“Nosotros no tenemos la culpa de que la gente salga a la calle sin protección, sin nada, es culpa de la ciudadaní­a no de nosotros, porque estamos trabajando con medidas de sanidad y protocolos de COEPRIS y Salud”, así­ es como Paulino Cortes, representante de los ambulantes, pinta la realidad que viven por culpa del COVID-19.

Así­ se defiende de las nuevas medidas de restricción que Gloria Molina, la titular de Salud en el Estado, estableció de nueva cuenta; en tanto que José Luis Loperena González, de la CANACO Victoria, no duda en afirmar que un nuevo cierre es un “tiro de gracia” para el comercio y la reactivación económica.

EL SUSTO DE GLORIA.

Gloria Molina está asustada, y con ella, buena parte de la población, entre los que me cuento. Todo porque Tamaulipas está viviendo una etapa completamente desconocida: pensó que bastaba la sana distancia y el cubrebocas para abatir la pandemia del COVID-19. Y nada, resulta que en los últimos dí­as, que se reportaron 1,232 casos de contagio y 85 fallecimientos. Con estos datos, ordena regresar, intensificar medidas restrictivas.

Los llamados a la población no están surtiendo efectos. Un experto en comunicación dirí­a que el destinatario no está dispuesto a escuchar el mensaje; las evidencias están en las redes sociales. Por ejemplo, Luis Vicente Ballinas como un fotógrafo comprometido con Tamaulipas, hace dí­as Publico imágenes de la zona centro, de la calle Hidalgo, y lo que se observa es, vaya pues, mucha, demasiada movilidad… eso, sin contar con lo que sucede en el Mercado Arguelles y sus alrededores.

BALNEARIO “LAS PILAS”.

En El Roble está el balneario “Las Pilas”. Siguiendo instrucciones de la autoridad esta cerrado a los turistas: en la entrada principal, colocaron troncos grandes y gruesos, para impedir la entrada de carros, así­ como lí­neas de alambre de púas. Y los policí­as se dan, una que otra vuelta, llegando hasta el Salto del Tigre, para conminar a los turistas a respetar la prohibición de aglomeraciones sociales.

Sábados y domingos, en las redes sociales, se observa como presumen que les encanta violar las reglas dispuestas por la autoridad. Publican fotos de los vehí­culos, estacionados a unos 150 o 200 metros e ingresan a pie. Es tanta la presunción, que suben fotos a la red social, unas individuales otras grupales, anotando: en un lugar de la mancha, disfrutando del rio. Entiendo que tienen ganas de salir del aislamiento…. Pero es una irresponsabilidad social.

NUEVAS RESTRICCIONES.

Ante el incremento de contagios y de muertes la autoridad toma nuevas decisiones. Una de ellas, es regresar a como estábamos antes de iniciar la reactivación económica: que las actividades no esenciales se vuelvan a suspender y, aunque no está confirmado, se anuncia que ahora hasta los

minisúper tendrá que cerrar sábados y domingos, así­ como el transporte público cancelar sus rutas esos dí­as.

La cuestión es muy simple: ¿Por qué nos negamos a cumplir con instrucciones sanitarias? Cerrar los negocios, efectivamente, afecta a la economí­a, a los empleos; por eso, se entiende, la necesidad de reactivar la economí­a y ahí­ está, recuerden, la actitud de los comerciantes ambulantes: cumplimos, pero la gente, la población, no cumple… a nivel nacional, en los últimos dí­as bajaron los contagios, pero en Tamaulipas y en su capital se incrementaron.

AUTORIDAD Y ORDEN.

La cuestión, para mí­, es que la población en general no respeta ni cumple disposiciones porque no hay una sanción: lo observamos, nos acostumbramos a usar el cinturón de seguridad porque nos multaban; y en el caso del “hoy no circula” pocos, o casi nadie lo respeta, porque no hay multa… no hay castigo. ¿Es necesario que nos castiguen para cumplir, acatar instrucciones?

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí