Golpe a golpeÂ
Â
+ López Obrador va por los 300 diputados federales; Morena poco le ayuda
+Por su estructura AN ganaría la mayoría de las alcaldías y curules locales
+ Mansur Pedraza y Rivera Rodríguez, avanzan rumbo al proceso electoral
Por Juan Sánchez-Mendoza
El lunes 7 quedó instalado el proceso para elegir a 300 diputados federales de mayoría relativa que, sin temor a equivocarme, es la contienda que más le importa al presidente Andrés Manuel López Obrador, pues precisamente del escrutinio depende el tránsito de su régimen hacia la segunda mitad del período constitucional.
Sin embargo, su partido, Movimiento Regeneración Nacional (Morena) está prácticamente en la orfandad desde que él decidió ‘no meter mano’ en los asuntos internos como la renovación de la dirigencia, aun sabiendo que el membrete marrón, sin su figura, poco le significa al conglomerado social.
Para colmo, los grupos de interés que ahí concurren dan espectáculos grotescos todos los días, en su ambición de empoderamiento partidista, sin entender el daño que le hacen al proyecto de la cuarta transformación, bajo el rollo de así contribuir a la democracia.
Ya ve usted que ni siquiera lograron ponerse de acuerdo para armar la contienda interna relevista, por lo que el Instituto Nacional Electoral (INE), a regañadientes, pero atendiendo instrucción del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, decidirá (mediante una encuesta) quién ocupará la dirigencia que interinamente ostenta Alfonso Ramírez Cuéllar.
Hasta la víspera concursaron 51 aspirantes.
Pero el INE establecería también ayer (con otra medición) quiénes son los seis aspirantes que participarán en la encuesta nacional abierta, pese a la toma de sus instalaciones programadas por Alejandro Rojas Díaz-Durán, al advertir, él, piso disparejo.
En fin, eso sólo forma parte de la orfandad de Morena que se replica a lo ancho y largo de la República Mexicana, de cara al proceso electoral que más le interesa al jefe del Ejecutivo Federal.
Aquí en Tamaulipas, en 2018, Morena se adjudicó la Presidencia de la República, dos escaños en el Senado y, en coalición con el PT y PES, seis diputaciones (de 9) federales.
Obviamente, arrastradas por la popularidad del ‘Peje’.
No obstante, ahora, aunque esta alianza sea refrendada en las boletas no estará el nombre de Andrés Manuel López Obrador, por lo que Morena se ve obligada a reorganizarse so pena de perder (en las urnas) la mayoría en el Palacio legislativo de San Lázaro.
Respecto al estado, en ningún distrito electoral federal hay movimiento por parte de los simpatizantes o pocos militantes de Morena. Y ésta es una señal inequívoca del desorden partidista (ante la ausencia de un liderazgo), por lo que sería el nuevo dirigente quien improvise candidatos –como hace dos años lo hizo Yeidckol Polevnsky Gurwitz–, aliándose con otras fuerzas de menor monta (léase PT y PES).
Pero igual asoma la eventualidad de que el tabasqueño le ordene a los alcaldes de Matamoros (Mario Alberto López Hernández) y Ciudad Madero, Adrián Oseguera Kernion, como a los delegados federales (Bienestar) José Ramón Gómez Leal y Felipe Neri Garza Narváez (Gobernación), buscar las candidaturas por los distritos IV, VII, II y V, respectivamente; persuada a los diputados Joel Villegas González y Olga Patricia Sosa Ruiz (PES), como al legislador Armando Javier Zertuche Zuani (PT), de jugarse su reelección en los distritos III (con cabecera en Río Bravo), VIII (Tampico) y IX (Reynosa).
Sólo le faltaría cubrir las candidaturas en los distritos I –cuya cabecera es Nuevo Laredo– y VI (Ciudad Mante), donde, por cierto, el Partido Acción Nacional (PAN) conserva hegemonía político-electoral.
Este escenario no lo aceptan los agoreros domésticos de Morena pues les mueve el piso en su pretensión de la candidatura gubernamental (2022) pero… tampoco es descabellado, considerando que López Obrador influye, de una u otra forma, en la selección de abanderados.
Así que, señores, se abren las apuestas. Por vía de mientras, hay que esperar qué decide el INE sobre la encuesta para renovar la dirigencia.
Mientras tanto, el PAN surge como las mejor opción para adjudicarse, en las urnas, no solamente las 9 curules federales, sino las 22 estatales y de paso las alcaldías con mayor explosión demográfica.
Y que conste, gracias a su estructura.
Mar de aspirantesÂ
Ignoro quién contrató a la empresa Massive Caller para medir preferencias electorales aquí en Tamaulipas, en vísperas de iniciar el proceso local, que hoy inicia (en apego a la legalidad), pero me queda muy en claro que trata, esa encuestadora, influir en el ánimo ciudadano ‘por recomendación’, pues contempla sólo a ciertos personajes sin considerar a otros que con méritos propios se han ganado el derecho de buscar las posiciones en juego, ya en a nivel federal o estatal.
En su medición la encuestadora sólo contempla a quienes supone son ‘la mejor oferta’, aun cuando la percepción ciudadana es distinta –en todos y cada uno de los municipios–, e irresponsablemente ofrece cifras que no corresponden a la realidad.
Sitúa, en sus parámetros, sólo a quién le da la gana –¿o paga por sus servicios?–, desestimando personajes con posibilidades de ser candidatos, merced a su activismo y/o militancia partidista.
Hasta ayer, al arrancar el proceso local para elegir 43 ayuntamientos y 22 diputados de mayoría relativa, la firma encuestadora divulgó escenarios respecto a 7 municipios; y arbitrariamente citó a los aspirantes elegidos por cuenta propia, sin tomar en cuenta a otros con amplias posibilidades de ser candidatos a las alcaldías.
Aduce ‘careos’ en su medición, pero, repito, sólo entre quienes supone serán ungidos, así que le corrijo que buscan las candidaturas edilicias, allá en Nuevo Laredo, Yahleel Abdala Carmona (PRI), Carmen Lilia Cantúrosas Villarreal (Morena), Imelda Margarita Sanmiguel Hernández (PAN), Mónica García Velázquez (PRI), Jesús Valdez Zermeño (PRI) y Manuel Canales Bermea (PAN).
Por Matamoros, se apuntan Mario Alberto López Hernández (Morena), quien iría por la reelección, a menos que atendiera el llamado de AMLO pa’ ser candidato a diputado federal; Héctor Silva Santos (PRI), Héctor Escobar Salazar y Pedro Luis Coronado Ayazagortia (PRI).
Allá en Tampico se mueven Magdalena Peraza Guerra (quien fuera en dos ocasiones alcaldesa) y la diputada federal Olga Patricia Sosa Ruiz. Sin embargo, el presidente municipal, Jesús Antonio Nader Nasrallah, pretende ser reelecto y en su planilla, como condición al PAN incluye a René Sentíes Barrios para que sea candidato a diputado local.
En Reynosa el diputado local Rigoberto Ramos Ordoñez encabeza las preferencias, ajenas a la medición de Massive Caller. Es de Morena, por lo que la empresa encuestadora no le cede más méritos, pues sitúa en primer lugar a la alcalde Maki Esther Ortiz Domínguez (por la reelección), seguida de Carlos Peña Ortiz (hijo de la edil); en tercer sitio ubica a las priistas Olga Garza Rodríguez, María Esther Camargo Félix y Aída Zulema Flores Peña; en tanto da favorito a Gerardo Peña Flores.
Respecto a Victoria, la encuestadora cita, solamente, a í“scar Almaraz Smer, Alejandro Etienne Llano y Mariana Rodríguez Mier y Terán, por parte del PRI, así como a Eduardo Gattas Báez –pretenso candidato de Morena–, desatendiendo la posibilidad de que el membrete marrón ‘sorprenda’ con una candidatura de unidad (¿acaso Luis Torre Aliyán?) para enfrentar en la urna a María del Pilar Gómez Leal, Miguel Mansur Pedraza, Mario Ramos Tamez, Patricia Pimentel Mansur o Gustavo Cárdenas Gutiérrez.
En fin, este rejuego apenas inicia.
Correo: jusam_gg@hotmail.com
Caminante no hay caminoÂ
El sistema de partidos, hasta hoy, luce anacrónico.
Y el Instituto Nacional Electoral (INE) así lo refrenda.
Lo digo porque son los mismos membretes que, desde hace décadas, se reparten las posiciones políticas a su conveniencia.
Según determinó el INE, sólo el PES tiene registro como partido (luego de perderlo en 2018), de los casi diez solicitantes –entre ellos, el de Felipe Calderón Hinojosa, alias ‘FeCal’ o ‘Comandante Borolas’–, pero ocurre que los siete otros con registro oficial son más de lo mismo.
O sea, no tienen militantes suficientes para defender derechos propios en el terreno electoral.
Según las estadísticas del INE a nivel nacional, los partidos mantienen la siguiente militancia válida:
Partido Acción Nacional (PAN): 252 mil 140.
Partido Revolucionario Institucional (PRI): 2 millones 65 mil161.
Partido de la Revolución Democrática (PRD): Un millón 242 mil.
Partido del Trabajo (PT): 448 mil 492.
Partido Verde Ecologista de México (PVEM): 660 mil 874.
Movimiento Ciudadano (MC): 381 mil 735; y
Movimiento Regeneración Nacional (Morena): 466 mil 931.
Se hace camino al andarÂ
Fuerte pisa, en su andar como recolector de afiliados al Partido del Trabajo (PT) el promotor deportivo Rubén Rivera Rodríguez (RRR), quien apunta a la candidatura por la presidencia municipal de Victoria.
í‰l conoce, bien, la problemática citadina, ocupando parte de su tiempo en asistir al conglomerado más necesitado con despensas, chapoleo de las áreas verdes (sobre todo espacios deportivos), llevando uniformes, balones y enseres.
Así que no hay que descartarlo en el proceso electoral local.
Miguel Mansur Pedraza es otro personaje que se distingue por atender labores altruistas.
No sólo ahora –siendo presidente del Club de Futbol Correcaminos–, sino durante su vida como empresario, por lo que es uno de los aspirantes más firmes a la candidatura panista por la alcaldía.
Poca gente, como él, conocen la historia de esta localidad; mantienen su arraigo y apego citadino, por lo que a Miguel le duele la situación que al momento presenta la localidad.
De ahí su intención de ser alcalde.
CicutaÂ
Hay, en el ambiente, mucha tristeza, dolor, como indolencia irresponsable. Y es que no todos creemos en la gravedad de la pandemia.
De cualquier forma, los invito a que atiendan las recomendaciones del sector Salud.
Y hasta eso, sin importar colores ni ideologías.