Según la carpeta de investigación FIIZP/IZP-9/UI-1S/D/0720/09-2020 de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México un hombre de nombre Christian “N†decidió denunciar a su madre porque esta lo corrió de la casa a escobazos y con cubetas de agua.
El hombre de 30 años se sintió ofendido por la acción de su madre y otra familiar quienes juntas le arrojaron cubetas con agua y a escobazos lo sacaron del lugar porque solo se la pasaba jugando todo el día.
Así acudió la fiscalía para levantar una denuncia por agresión y hostigamiento en contra de su progenitora y para poder regresar a casa.
La madre le pidió en repetidas ocasiones que buscara un trabajo, pero el treintón ni estudiaba ni trabajaba, únicamente se sentaba en el sillón a jugar videojuegos.
Los curiosos hechos ocurrieron en colonia La Polvorilla, en la alcaldía Iztapalapa.
No es la primera vez en que la relación madre hijo se vuelve un problema
Según datos recientes del Banco Mundial ha aumentado el número de jóvenes que ni estudian ni trabajan (NiNis); se calcula que 600 millones es la cifra actual de jóvenes que no están en el campo laboral ni en el campo académico. La institución estimó que en la siguiente década mil millones se unirán a las filas del empleo, pero solo el 40% de ellos obtendrán una plaza.
Apenas el pasado mes de agosto de 2020 la Corte Suprema en Italia determinó que los padres no tienen obligación de mantener a sus hijos adultos y que estos deben buscar trabajo al terminar el bachillerato.
De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística de Italia, el 64.3% de los adultos jóvenes entre los 18 y los 34 años, aún viven con sus padres. De dicha cifra, solo el 36.5% siguen estudiando, 38.2% tiene un empleo y 23.7% está en la búsqueda de uno.
En México un estudio realizado por la compañía De las Heras Demotecnia, en el que se analiza la situación familiar y social de los millennials (nacidos entre 1980 y 1995), encontró que 47% de los millennials mexicanos actualmente se dedica a estudiar, y de este universo, el 75% aún recibe el apoyo de sus padres o familia para cubrir sus gastos escolares. De hecho, 63% de los encuestados mencionaron que aún viven con sus padres, lo que no les incomoda a cuatro de cada 10 encuestados.