DESDE ESTA ESQUINA.
MELITON GUEVARA CASTILLO.
16.09.2021.
EL ERROR Y LAS CONSECUENCIAS.
Las reglas, o la práctica, del ejercicio político han cambiado. Antes, por ejemplo, la regla era no moverse, para poder salir en la foto; en cambio, quienes deseaban progresar en sus carreras políticas, tenían que cultivar, apapachar, ganarse el afecto, de quien decidía la elección. Se le conocía como “el fiel de la balanza” y era el Presidente de la Republica a nivel federal y en lo local, el gobernador en turno. Claro, eran los tiempos del priismo poderoso y omnipotente.
Hoy ha cambiado, en el contexto, las personas y el partido en el poder, ahora es MORENA. Y el cambio, brusco, es la forma de hacer política: ahora se tienen que mover, para salir en la foto, por eso hay más de 10 precandidatos de MORENA que, como diría Héctor Garza, “no compiten” por el afecto del Presidente, pero si por aparecer en las encuestas y mostrar un posicionamiento que ayude a MORENA, al partido del Presidente, ganar la gubernatura en el 2022.
MOVERSE Y EL ERROR.
Cuentan, y estoy de acuerdo, que solo aquel que no hace nada, el que nada de muertito, no puede equivocarse; puede acertar, o equivocarse, efectivamente, el que se mueve. Y ese es el riesgo, digamos, de Américo Villarreal Guerra, de Héctor Garza, de Rodolfo González, de José Ramón Gómez Leal, de Erasmo González, de Alejandro Rosas, de Adrián Oseguera, de Mario Alberto López, de Carmen Lilia Canturosas o de Maki Ortiz, entre otros, pues cada día se agregan más y más.
En política hay una expresión muy socorrida: después del error, todo lo demás, el resto, son las consecuencias. Y efectivamente, así sucede: todos estamos expuestos a un error y a sufrir las consecuencias y más en política, donde los errores se magnifican y, por otra parte, entra en juego el juego sucio, el fuego amigo y cosas de esas, que hacen aparecer pecados, pecadillos y hasta pleitos familiares. El que anda en política lo sabe: construir un prestigio tarda años, destruirlo, un minuto o un twitter.
¿SE EQUIVOCO EL GUASON?
No puedo afirmar si se equivocó o no Héctor Garza o si todo es consecuencia de la guerra sucia. Hace días, por ejemplo, se difundió ampliamente que Rodolfo González había renunciado a su trabajo en RTC, para dedicarse de tiempo completo a la tarea de posicionarse en el ánimo de los tamaulipecos en víspera de la encuesta de MORENA. Así, hace días, se difundió un comunicado de prensa de la Oficina Presidencial, en alusión a un video de AMLO, donde brinda apoyo a Héctor Garza, se afirma que se dio vista a la Fiscalía General de la Republica para que actué en consecuencia.
En el presunto comunicado de la Oficina Presidencial no se dan nombres. Se hace notar, en cambio, que no es correcto usar la figura presidencial para promoverse. La cuestión es que el video es real, pero es de la otra elección. En fin, la cuestión es la siguiente: si revisamos las redes sociales vamos a encontrar que todos los precandidatos difunden imágenes con el Presidente e incluso aluden a su amistad. Hay una imagen, por ejemplo, de Américo con AMLO y en el pie de foto consignan que el Presidente afirma que es el mejor para gobernar, se entiende, a Tamaulipas.
Y José Ramón se publicita, paga publicidad, de sus acciones sobre vacunación y los programas de bienestar social.
NO OBEDECER.
Antes el error de quien deseaba avanzar en la política era hacerle regalos, apapachar a quien decidía, era su forma de ganarse, vaya pues, su afecto. Hoy en día, según los distintos testimonios, el peor error que puede cometer un morenista es no obedecer, no cumplir la encomienda presidencial. No pueden darle la contra, quien lo hace, en términos reales, está cavando su tumba política: Irma Sandoval, cuando era titular de la Función Pública, en animo de apoyar a su hermano, le contra al Presidente en Guerrero, pretendió descarrilar a Félix Salgado Macedonio.
La lista es grande: como quien dice, todos aquellos que han renunciado, o que los han cesado, ha sido por eso. El caso emblemático es de Alfonso Romo, que en más de una ocasión choco en la visión de su jefe sobre cómo debe ser la función pública y la relación con los empresarios. Quien fuera titular de Hacienda, Carlos Urzúa al renunciar acoto:
«Estoy convencido de que toda política económica debe realizarse con base en evidencia, cuidando los diversos efectos que ésta pueda tener y libre de todo extremismo, sea éste de derecha o de izquierda. Sin embargo, durante mi gestión las convicciones anteriores no encontraron eco».
ERROR BASICO.
Andrés Manuel López Obrador bien lo dice: que no es igual que los otros, se proclama juarista, defensor de la democracia, de la honestidad, pero es inflexible en un punto: los valores y principios de la 4T y el principal error que pueden cometer sus iguales morenistas es, sencillo, simple: no estar de acuerdo con él. Por eso, unos se quedan y otros se van.