PRESENCIA
ANA LUISA GARCÍA G.
01-01-2021
< Universitarios confirman a Guillermo Mendoza como rector
< Diputados de la LXV legislatura empiezan a dar color
< De Salman a Escanio, renuncias voluntarias de auditores
1.- La Junta Permanente instalada para conducir el proceso electoral interno de la Universidad Autónoma de Tamaulipas, confirmó al C.P. Guillermo Mendoza Cavazos como rector electo, producto de un ejercicio celebrado dentro del marco legal que marca el Estatuto Orgánico. La comunidad universitaria debe celebrar la ordenada y muy concurrida participación de docentes y estudiantes, lo cual da legitimidad a la jornada de este jueves 30 de septiembre.
Cabe mencionar que en este procedimiento el Rector, Ing. José Andrés Suárez Fernández, fue ejemplo al acudir a depositar su voto en una de las ánforas instaladas en el edificio de la Rectoría.
Los detalles son los siguientes, el 90 % de los profesores emitieron su voto y un 75 % de estudiantes de los 26 planteles universitarios hicieron lo propio, ejerciendo su voluntad a partir de las 7 de la mañana y hasta las 6 de la tarde.
Mendoza Cavazos fue candidato único a la Rectoría por propuesta de los consejos técnicos de los 26 planteles, y aprobado por la Junta Permanente de la Asamblea Universitaria. Con esto se dio cumplimiento al Artículo 28, Fracción IV del Estatuto Orgánico de la UAT, así como a la convocatoria emitida el 9 de septiembre pasado.
Queda pendiente la comparecencia de la Junta permanente ante la Asamblea Universitaria que sesionará con el propósito de conocer y en su momento aprobar los resultados y el dictamen correspondiente a la jornada electoral, como lo establece el artículo 28 fracción VIII del Estatuto Orgánico de la UAT.
2.- Los diputados locales de la LXV Legislatura que este jueves rindieron protesta, empezaron a dar color. El Primer Sobrino de Tamaulipas, Pepe Braña, ya anunció que se proponen modificar el reglamento del Congreso del Estado para que Morena presida por tres años la Junta de Coordinación Política.
En cuanto al “chapulineo”, empezó desde el primer segundo de ejercicio, el propio Braña dio a conocer que él (que es del PT) muy probablemente cambie de partido, iría a Morena a fortalecerlo, que buena falta le hace luego de que las diputadas Leticia Sánchez Guillermo y Lidia Martínez, tardaron más en rendir protesta como integrantes de la bancada de Morena, que renunciar a ese partido para sumarse a la bancada azul.
Por otra parte el nuevo pastor del rebaño legislativo morenista, diputado Armando Zertuche Zuani, confirmó que la Comisión de la Verdad en el Congreso de Tamaulipas es un hecho, y con su creación se proponen dar marcha atrás a las reformas aprobadas por la legislatura saliente y que representa un blindaje para la administración estatal en diversos temas.
En pocas palabras la ola guinda examina la posibilidad de echar abajo reformas realizadas por los diputados panistas a la Constitución de Tamaulipas.
Asimismo se refirió a la auditoría que realizará para conocer en qué términos están recibiendo al Poder Legislativo. Y esto seguramente incluye a la propia Auditoría Superior del Estado, que en el caso de que se encuentren malos manejos, se convertiría en el pretexto ideal para la “renuncia voluntaria” del auditor.
NINGUNO HA TERMINADO LOS 7 AÑOS.- No es la primera vez que se pone en práctica un procedimiento de rendición de cuentas a un auditor y no termina su periodo. Incluso con rudeza innecesaria les han pedido la renuncia, fue el caso del contador Miguel Salman Álvarez (provenía de una administración priista) allá por noviembre de 2016, sólo coexistió durante dos meses con el actual gobierno panista.
Usted recordará que el veterinario y Presidente de la Comisión de Vigilancia, Joaquín Hernández Correa, para más detalles hijo de La Quina, emplazó de manera pública a Salman para que abandonara el cargo, y afirmó que ya se le había presentado formalmente su renuncia, eso ocurrió a fines de noviembre de 2016.
Los elementos que podemos aportar para el caso, es que de acuerdo a la Ley de Fiscalización y Rendición de Cuentas para Tamaulipas, el Auditor Superior de Estado podrá ser removido por causas graves que instituye la misma legislación, y en cuyo caso será sustituido por el 1er Auditor Especial, que es alguien que ya está en el área y tiene nombre y apellido, mismo que en cumplimiento a la ley, es quien sustituye de manera provisional al Auditor Superior, mientras el Jefe del Ejecutivo en turno, propone una terna de la cual el Congreso elegirá al relevo.
De tal manera que el actual Auditor Superior del Estado, Jorge Espino Ascanio, tiene segura su silla mientras sea gobernador Francisco García Cabeza de Vaca. Con un nuevo gobernador, sea del partido que sea, puede haber un cambio aunque su periodo no hubiera finalizado. Anote Usted, que el Ing. Jorge Espino Ascanio asumió el cargo el 9 de febrero de 2017, es decir cuatro meses y 8 días después de que arribó al poder Francisco García Cabeza de Vaca.
La realidad es que varias de las leyes vigentes contienen un alto grado de fragilidad, en este caso la aludida Ley de Fiscalización establece un periodo de siete años para el ejercicio del Auditor, ciclo que por ejemplo Salman cumpliría en abril de 2018, le faltó un año dos meses para concluirlo, pero también su antecesor Gerardo Robles Riestra, fue relevado sin explicación alguna en el inicio de la gestión de Egidio Torre Cantú.
El periodo se hizo de siete años y no de seis, precisamente para evitar la coincidencia o complicidad con los gobiernos sexenales, pero ya dijimos, las leyes son frágiles y fáciles de amoldar de acuerdo a las circunstancias.
De tal manera que una fiscalización puede arrojar elementos, si se lo propone la bancada morenista, que anticipe el relevo del Auditor, sin esperar un cambio de gobernador, todo está en lo que encuentren, la documentación que logren integrar y la ansiedad por ejercer el poder, porque bien pueden esperar unos cuantos meses y esto sería a partir de la nueva administración sexenal.