Claudia, ¿incómoda?

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At’n.                                         material a publicarse el viernes 22 / 03 / 2024

 

Golpe a golpe

 

Por Juan Sánchez Mendoza

 

La gira de proselitismo político-electoral de Claudia Sheinbaum Pardo en la frontera (norte) tamaulipeca seguramente le resultó grata por la calidez con que fue recibida –y hasta vitoreada en los eventos que encabezó–, aunque también, incómoda, supongo, por los reclamos mostrados por la imposición de candidatos a cargos de representación popular.

Hay tres casos que, presumo, no pasó por alto; y los tendrá presentes, por significar obstáculos para el avance de la cuarta transformación:

1) El señalamiento de un periodista, en Reynosa, por la nominación de candidatos a las alcaldías –es el caso de Carlos Víctor Peña Ortiz–, pese a ser rechazados socialmente por estar involucrados en ilícitos;

2) El repudio poblacional (mostrado públicamente), hacia Mario Alberto López Hernández, alias ‘La borrega’, en la Plaza Hidalgo de Matamoros, en el evento más importante desarrollado en la localidad; y

3) El pronunciamiento de la candidata al Senado de la República por el Partido del Trabajo (PT), Cendy Yarelly Robles Méndez (en Nuevo Laredo), acusando (frente a Claudia) que hay candidatos a las alcaldías que habitan en la Unión Americana y buscan gobernar municipios o ser reelectos.

La abanderada presidencial de la coalición ‘Sigamos haciendo historia’ tiene ya la película completa de lo que ocurre en Tamaulipas. Así que nada extraordinario resultaría que, en lo sucesivo, morena sustituya candidaturas federales y domésticas, bajo la tesitura de atender el plan ‘C’ del presidente Andrés Manuel López Obrador que, por cierto, impulsa Claudia.

Ella, Sheinbaum Pardo, finca su triunfo en la tierra tamaulipeca porque aquí cuenta con el apoyo irrestricto de la militancia y simpatizantes guindas liderados por el gobernador Américo Villarreal Anaya.

Pero, conforme a la máxima de que ‘el pueblo manda’, no puede pasar por alto esos reclamos.

Así que habría reacomodos.

 

Los seis

En el evento de promoción política de Claudia Sheinbaum Pardo estuvieron presentes, en Nuevo Laredo, los seis candidatos al Senado de la República que van coaligados sólo por la Presidencia de la República, porque en la lid por los escaños compiten entre sí.

Ajustándonos al acomodo en que fueron situados (en el pódium), Olga Patricia Sosa Ruiz y José Ramón Gómez Leal (morena), tuvieron ‘espacios privilegiados’ al ser colocados junto a Claudia; en tanto Eugenio Hernández Flores, Maki Esther Ortiz Domínguez, Cendy Yarelly Robles Méndez y José Francisco Chavira Martínez, ocuparon los extremos, mediando entre ellos y Sheinbaum los abanderados a diputados federales.

¿Qué significado tiene esto?

 

Unidad en Victoria

Lo que parecía imposible, Eduardo Abraham Gattás Báez lo hizo: unir a los aspirantes a la candidatura edilicia de Victoria (por parte de la alianza entre morena, el PT y el PVEM), en torno suyo.

Estuvieron en el encuentro con el alcalde, Jorge ‘Tico’ García, Gerardo Illoldi Reyes y Marggid Rodríguez Avendaño.

Sólo faltó José Braña Mojica, cuyo pretexto para no firmar un pacto de unidad por Victoria, es que anda en campaña.

Como sea, ‘Lalo’ mostró músculo, refrendado que ‘morena está más unido que nunca para evitar el regreso de la tiranía”.

Esa demostración de urbanidad político-partidista fortalece a la alianza ‘Sigamos haciendo historia’, al menos en la capital del estado, y da certeza a la candidata presidencial Claudia Sheinbaum Pardo de que el voto de los victorenses será a favor de ella y Gattás Báez.

Al hacer uso de la palabra ‘Lalo’ señaló: “Aquí nos mueve un propósito superior, como es el bienestar de Victoria y un profundo amor por su gente. Aquí no hay vencedores, ni vencidos, aquí hay unidad, compañerismo, el interés común de evitar el regreso del autoritarismo y un objetivo principal, que a Victoria le siga yendo bien”.

 

Lo contrario

En Nuevo Laredo, Reynosa y Matamoros, los candidatos a las alcaldías, de continuar abonando los pleitos con sus enemigos políticos, le complicarían los escenarios a morena.

Entonces, ¿por qué el alto mando partidista no tira un manotazo en la mesa para imponer el orden?

Carmen Lilia Cantúrosas Villarreal, Carlos Víctor Peña Ortiz y Alberto Granados Favila, bien ameritan un fuerte jalón de orejas que los obligue a buscar a sus contrincantes partidistas y pedirles su apoyo.

De lo contrario habrá caos durante todo el proceso electoral en esas localidades fronterizas.

Correo: jusam_gg@hotmail.com

 

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